RECLAMACIONES A LA JUNTA
Córdoba asiste al nacimiento de dos mareas sanitarias
Hoy se celebra el encuentro constitutivo de una asamblea ciudadana y el Rey Heredia acoge otra reunión distinta el lunes
Las mareas blancas por la sanidad , los movimientos para presionar a la Junta con el objetivo de que mejore los hospitales y centros de salud de Córdoba , empezarán su recorrido en estos días de la manera más cordobesa posible: por separado .
Con encuentros preparatorios distintos para pasmo de quienes quieren formar un polo de la sociedad civil lo suficientemente potente para que la Junta atienda las determinaciones de las demandas que se realizan desde la provincia. Córdoba ha sido uno de los territorios donde no han tenido eco las protestas inspiradas por el doctor Candel, convertido en «Spiriman », aunque existen síntomas de que algo se estaba moviendo: el fuerte desacuerdo social con el plan de aparcamientos del Reina Sofía.
La primera de las reuniones tiene lugar hoy mismo y está protagonizada por organizaciones con más recorrido. Se celebrará en el salón de actos de un instituto de Secundaria del barrio de Fátima y lleva el nombre de Asamblea Ciudadana por la Sanidad Pública . Entre sus convocantes, se encuentran organizaciones claramente reconocibles como cuatro centrales sindicales (entre otras, Comisiones Obreras o CSIF ), No me quites mi hospital (la entidad más veterana por la dignificación del Materno Infantil) o la recientemente constituida plataforma contra la privatización de los estacionamientos del centro sanitario de referencia. Además, están Facua, las Mareas Blancas y dos asociaciones de vecinos de la ciudad.
La s egunda reunión , completamente distinta, se realizará el próximo lunes en el antiguo colegio Rey Heredia . La difusión del encuentro se encabeza con el nombre «Marea Blanca» , que también utiliza la primera plataforma descrita .
En los ámbitos de las protestas se vincula esta organización a los intereses del partido político Podemos , quien ya ha sido acusado en otras provincias de intentar capitalizar el desarrollo del desencanto contra el funcionamiento del SAS.