TRIBUNALES
Condenan a cinco años de cárcel al hombre acusado de intentar matar a su hermana
El tribunal le aplica la mínima pena por su patología, que complementan con otro lustro de internamiento psiquiátrico
El tribunal de la sección Tercera de la Audiencia de Córdoba ha condenado a cinco años de cárcel y a otros cinco de internamiento psiquiátrico a un hombre aquejado de epilepsia y con retraso mental que intentó matar a su hermana a cuchillazos . El tribunal ha considerado probado que el 11 de mayo de 2015 el hombre, cuando estaba preparando la comida con su hermana en casa de su madre, donde vivían, se abalanzó sobre ella «con ánimo de causarle la muerte» clavándole un cuchillo en el tórax mientras le decía « te mato, te mato », según recoge la sentencia.
Cuando la mujer logró quitarle el arma, el condenado «intentó estrangularla con las manos » y después de que consiguiera zafarse de su hermano, éste cogió otro cuchillo y se lo clavó debajo del pecho, teniendo la mujer que ser intervenida pues las heridas, en la zona torácica, eran de «riesgo vital». Los magistrados han considerado que «existió en el acusado intención de acabar con la vida» de su hermana tanto por el arma usada, dos cuchillos de cocina «susceptibles sin ningún género de duda de producir la muerte de una persona», como por las zonas del cuerpo donde se los clavó, así como por sus manifestaciones: «te tengo que matar», propósito que ya le había contado a su sobrina y que incluso llegó a insinuar a los agentes policiales.
La causa de la animadversión contra su hermana era la «idea delirante» que el acusado tenía por considerarla responsable del aumento de su medicación que le había prescrito el facultativo debido a su enfermedad, epilepsia, patología sobre la que también incidía un retraso mental moderado que le provocaba un déficit intelectivo. Sin embargo, los médicos forenses no pudieron afirmar que sus patologías anulasen totalmente sus facultades en el momento de la agresión ya que llegó a reconocer los hechos minimizándolos y justificándose argumentando que su hermana era la culpable de su aumento de medicación.
Los togados han considerado aplicarle el grado mínimo de la pena por intento de homicidio, cinco años de cárcel, que complementan con otros cinco años de internamiento en un centro específico para su tratamiento por el riesgo de que pueda volver a intentar agredir a su hermana si mantiene su delirio contra ella, a quien, cuando concluya los 10 años privativos de libertad tampoco podrá acercarse durante seis años.