José Luque Velasco - DESDE MI RINCÓN
La clave: Participar
En determinados asuntos el buenismo no es virtud sino algo que hace daño a la sociedad y a nosotros mismos
Cuando esta columna salga a la luz estaremos estrenando año. En este Diario, el historiador y amigo José Calvo Poyato - «Adiós a otro año» 30.12.2017- hace completo inventario de lo realizado y de cuanto se ha dejado de hacer en Córdoba durante el pasado año. El resultado no es muy positivo. Su lectura nos permite conocer la gestión que se ha hecho con los impuestos que pagamos y forma nuestra opinión para tomar aquellas decisiones que consideremos necesarias para que el balance que se haga cuando finalice el año que comienza sea más favorable para Córdoba. Porque de la actitud que adoptemos cada uno de nosotros dependerá ese resultado.
Como ciudadano de Córdoba lo primero que deberíamos hacer, estando como estamos en democracia, es participar . No limitarnos a trabajar, pagar impuestos, votar cada cuatro años y, a lo sumo, lamentarnos y juzgar a nuestros representantes en la barra de la cafetería o cuando estamos con la familia o amigos. Hay que participar de manera pacífica pero abierta . ¡Sin reserva alguna! ¡En libertad! ¡Qué se sepa nuestra opinión! Si no actuamos así no tendremos derecho a quejarnos de que algunos actúen como dueños de la verdad. Cuando no estemos de acuerdo con algo, manifestemos nuestra opinión y expongamos las razones que la sustenta. Que nadie piense que nuestro silencio es sinónimo de conformidad . A veces lo justificamos diciendo que no merece la pena discutir determinados temas y menos con determinadas personas. ¡Sí lo merece! Lo dije en la columna anterior y lo repito ahora. En determinados asuntos, el buenismo no es virtud, sino algo que hace daño a la sociedad en general y a nosotros mismos.
La segunda cosa que debemos tener presente en este año es el convencimiento de que en nosotros, en cada uno de nosotros de manera individual, está depositada la soberanía nacional . Nadie es más importante que nadie. Los medios de comunicación y nosotros mismos hemos subido demasiado alto a los políticos, olvidando que ellos sólo son representantes y empleados de quienes portan la soberanía . Se les ha dado excesivo protagonismo. Hay ciudadanos y ciudadanas corrientes en todos los estamentos sociales y en todas las profesiones que al tratarlos y escuchar sus ideas y propuestas, dejan en paños menores las que exponen muchos de los que se suben a la tribuna del Parlamento. Lamentablemente no se les da la atención que merecen. Por ello animo a los medios de comunicación a poner en valor ese activo tan importante que tiene España y de manera particular Córdoba.
Córdoba tiene todo lo necesario para el triunfo . Alcanzarlo es responsabilidad de todos. A todos y especialmente a los lectores, les deseo un feliz, exitoso y participativo año 2018.
