Una cancela hará que la puerta principal del Palacio de Viana de Córdoba vuelva a estar abierta

Algo más que unas obras de mantenimiento son las que ha emprendido la Fundación Cajasur en uno de los recintos monumentales más emblemáticos y activos de Córdoba: el Palacio de Viana . Están a punto de terminar y no sólo traen consigo mejoras estructurales y reparaciones que evitarán problemas de conservación, sino también la recuperación de una estampa que se había perdido con los cambios en los últimos años.

Así lo explicó el director del Palacio de Viana , Leopoldo Izquierdo , que hizo hincapié en que a partir de ahora se volverá a disfrutar de una estampa «icónica», que es la de la puerta principal abierta con el Patio de Recibo a la vista. Es algo que había sido lo clásico hasta 2012, explicó, cuando se trasladó la taquilla y el punto de recepción a los visitantes a pocos metros, al Patio de la Cancela. La puerta entonces quedó cerrada, pero con eso se perdía la vista del Patio de Recibo.

Se seguirá entrando por el mismo sitio, pero se volverá a ver el interior, ya que el Palacio de Viana ha ideado una cancela que permitirá que al mismo tiempo en que el acceso al interior está cerrado se pueda disfrutar del interior, «del magnífico patio renacentista ». Se trata de una reja que se inspira en diseños antiguos, «aunque es actual, porque se trata de no falsear », y que aunque tiene el color del hierro en realidad está hecha en aluminio macizo, con lo que el peso de esta pieza, que está unida al portón, es muy inferior.

Entronca a su vez con las obras que la Fundación Cajasur ha realizado en el interior. Algunas de las más significativas han sido en las caballerizas , que son tres naves de planta basilical. «Las columnas estaban arenizadas, debido a que presentaban humedad por capilaridad», explicó el director del Palacio de Viana, y eso ha obligado a reforzar la cimentación de esta zona. La relación de este proyecto con el de la puerta está en que se ha constatado el empleo de una solución «única» en los arcos del Patio de Recibo, que permitía la entrada de los carruajes al interior de esta zona y su posterior paso a la zona de las cabellerizas que ahora se ha restaurado. Se trata, recordó Leopoldo Izquierdo, del «doble arco cruzado para carruajes», que es una de las soluciones constructivas más singulares de Viana.

En todo el proyecto que va desde la cancela del portón principal hasta las cabellerizas se ha actuado después de un largo estudio dirigido por los arquitectos Francisco Gómez y Héctor Romero y en diálogo con expertos y profesores como los de la italiana Universidad de la Sapienza. Los trabajos han supuesto también actuar en los tejados y cubiertas de la zona sur. Había problemas de humedades que podían afectar a algunos de los valisosos artesonados que se conservan en las habitaciones, en particular el renacentista.