Agricultura

El campo de Córdoba convoca una manifestación para el martes 21: «La situación es ruinosa»

Costes, reforma de la PAC, mano de obra y terceros países unen a todo el sector

Protesta de trabajadores del campo en marzo de 2021 Valerio Merino
Rafa Verdú

Rafa Verdú

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El campo cordobés , como el de todo el país, está a punto de estallar, y no es sólo una metáfora. El horizonte se presenta negro debido a una conjunción de factores , algunos coyunturales y otros más estructurales, que no tienen que ver en su mayoría con la crisis económica del coronavirus, aunque los efectos de ésta ha dejado también tocado al sector. Se avecina una ‘tormenta perfecta’ y los agricultores y ganaderos no están dispuestos a sortearla sin protestar de nuevo.

Las cuatro principales organizaciones agrarias (Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agroalimentarias)han convocado una gran protesta parel próximo martes 21 con una caravana que saldrá a las 10 de la mañana del Arenal y terminará en la Subdelegación del Gobierno . Es la Administración del Estado quien más tiene que decir y hacer para solventar la crisis agropecuaria.

Las últimas grandes protestas del campo ocurrieron justo a ntes de la pandemia , en febrero de 2020. Después ha habido otras concentraciones pero de mucho menor calado debido a las restricciones sanitarias . Ahora el sector considera que ha llegado el momento de volver a echarse a la calle. Y llevan tiempo advirtiéndolo.

A grandes rasgos, hay cuatro factores conjurados al tiempo contra agricultores y ganaderos. Son, no necesariamente en orden de importancia, la reforma de la PAC, los elevados costes de producción , los problemas laborales y los mercados internacionales.

Asaja, UPA, COAG y las Cooperativas Agrarias piden mantener los contratos temporales y adpatar el fijo discontinuo

La reforma de la PAC lleva años sobre la mesa, casi el mismo tiempo que llevan los empresarios protestando por un nuevo modelo que supondrá « menos presupuesto , más burocracia y más obligaciones», tal como indicaron ayer los convocantes en una comparecencia.

El nuevo formato de PAC hasta 2027 está más orientado al medio ambiente en lugar de fomentar la producción o modernizar las explotaciones , dos de sus mayores logros. La fijación de la población al mundo rural, eso de lo que tanto se habla hoy en día, es otro de sus aciertos y no habría sido posible sin la intervención directa de la UE.

El sector considera que el plan estratégico del Gobierno español, ya en trámite de exposición pública, «exige más a los a gricultores y ganaderos , pero con menos recursos y castigando a la agricultura y ganadería más productiva». Justo lo contrario de lo que la PAC ha venido promoviendo hasta ahora. Las críticas hacia el papel del ministro de Agricultura, el cordobés Luis Planas , son feroces en los últimos tiempos al respecto. Sobre todo, algunos nuevos conceptos que se han introducido en este apartado.

Las patronales reclaman que el Ministerio cambie sus propuestas; que la PAC sea «más justa» para Andalucía; reconocer la diversidad del campo andaluz; cambios en la distribución de las nuevas regiones agrícolas de la UE; modificar la política de «ecoesquemas», un concepto nuevo que busca incentivar la sostenibilidad de las explotaciones; mantener las ayudas a los empresarios que tienen la agricultura como una actividad complementaria; y suspender la iniciativa del Nuevo Pacto Verde del Ministerio.

La subida de las tarifas de electricidad han sido un mazazo para una cuenta de explotación dañada. El riesgo, sobre todo, es el principal perjudicado en esta tesitura, aunque también las explotaciones agroalimentarias , pero lo peor es el elevado coste de las materias primas o combustibles.

Las patronales tienen datos sobre el aumento de precios: piensos, casi un 30% en el último año; semillas, un 20%; abonos, un 48%; el agua, un 33%; los plásticos para invernaderos, un 46%; o el gasóleo agrícola, un 73%. Todo eso hace que el precio de los alimentos siga subiendo para los consumidores finales, pero los productores siguen cobrando lo mismo. En consecuencia, no cubren los gastos en muchos casos.

Han subido los piensos casi un 30%; semillas, un 20%; abonos, un 48%; el agua, un 33% o el gasóleo agrícola, un 73% en menos de un año

Entre las propuestas de los agricultores está un reparto más justo en la cadena alimentaria , acabar con al venta a pérdidas que realizan algunos comercios (así lo indican las patronales, aunque esa práctica está prohibida), superar la fijación de precios y medidas fiscales de apoyo al sector. También se deberían rebajar las facturas del agua y la luz e incluso, y ello a pesar de la sequía -algo que reconocen los empresarios-, «autorizarse el incremento en los regadíos para las épocas en que haya agua suficiente».

Mano de obra

La tercera nube negra de esta ‘tormenta perfecta ’ tiene que ver con la mano de obra. Por un lado está la reforma laboral prevista por el Gobierno, que incluye la conversión de trabajadores temporales -el modelo más usado en el campo, como en tantos otros sectores- en fijos discontinuos. Y por otro, las dificultades para contratar empleados extranjeros .

Las medidas que proponen las cuatro asociaciones convocantes contemplan mantener los contratos temporales, adaptar la condición de fijo discontinuo y bonificar las cotizaciones a la Seguridad Social en la conversión de los contratos.

Finalmente están los aspectos relacionados con los mercados internacionales y las exportaciones e importaciones. Los empresarios consideran que el mayor problema está en la « competencia desleal » de terceros países que pueden producir más con menos restricciones ambientales y unas condiciones laborales muy distintas y que luego tienen entrada en el mercado nacional o europeo sin tantos problemas como pudiera parecer.

La reforma de la PAC contribuirá, según las patronales, a aumentar más aún las diferencias y podría llevar a la «deslocalización», es decir, el traslado de las explotaciones agroganaderas a esos países. Las propuestas en este apartado buscan exigir a los competidores de otros países los mismos requisitos que impone la UE, algo harto difícil de conseguir, así como acuerdos comerciales «justos».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación