¿Cambio sensanto?

Unas recientes declaraciones de la alcaldesa de Córdoba , Isabel Ambrosio , merecen algún comentario. Informa de que «ya se han sentado las bases de otro modelo de ciudad » sin decirnos de qué modelo se trata. Sólo apunta a «un cambio sensato , para colocar los intereses de la ciudad por encima de los números y de los afanes privatizadores del PP». Con esas palabras como única aclaración seguimos sin conocer el proyecto, pero sabemos que intentará llevarlo a cabo sin tener en consideración el coste económico que pueda representar para el bolsillo de los contribuyentes. Actuar así es propio de quien sabe que juega con dinero ajeno y que nunca tendrá responsabilidad económica si el resultado de su gestión es nefasto. Con toda humildad y en la seguridad de que la señora Ambrosio estará abierta al diálogo, escribo esta columna.

En este mismo diario y con fecha del 31 de enero de 2011, gobernando en Córdoba IULV-CA con apoyo del PSOE, tres expertos economistas y profesores universitarios recomendaban al Ayuntamiento tomar determinadas medidas. Entre otras, « profesionalizar las empresas municipales » y «tener máximo respeto al dinero de los impuestos». También entendían que era una irresponsabilidad de los gestores municipales el excesivo endeudamiento que soportaba Córdoba. Ante estas opiniones, responsables del partido respondieron diciendo que «el papel de las empresas públicas según modelo aceptado por su formación política es, por encima de cualquier otra cuestión económica, el de servir como redistribución de la riqueza».

Desde esta columna y con el título «Empresas públicas a debate público» ya me pronuncié entonces señalando la necesidad de debatir sobre un tema tan espinoso ¡Ni caso! Los resultados de aquella gestión fueron los que fueron y todos los sufrimos. Y no me dirán que no se asemeja la política que se hizo por aquel entonces, con la que verbalmente anuncia la actual responsable municipal. Por eso no comprendo el «cambio sensato» del que habla la señora Ambrosio.

Decía el filósofo, intelectual y comunista alemán Karl Marx que «sólo hay una manera de matar al capitalismo : impuestos, impuestos y más impuestos». ¿Será que la señora Ambrosio y sus aliados quieren acabar en Córdoba con un sistema económico que se basa en la propiedad privada de los medios de producción y en la libertad de mercado? Digo esto porque así define la RAE la palabra capitalismo.

Ante tan extrañas e incomprensibles palabras de la primera autoridad política de Córdoba, los ciudadanos tenemos derecho a exigir mayor claridad y concreción , sobre todo, para saber lo que se avecina en los próximos tres años que restan de mandato. La incertidumbre es un freno a la inversión , y esta es cosa muy necesaria para el legítimo y necesitado desarrollo de una ciudad como Córdoba.