Patrimonio
El Cabildo salva el bajón de entradas de la Mezquita-Catedral de Córdoba con un crédito de 10 millones
La entidad eclesiástica realizó dos operaciones de cinco millones cada una con Cajasur
Si hay una entidad que ha tenido un bajón de ingresos a causa del Covid, es el Cabildo Catedral que gestiona las cuestiones materiales y espirituales de la Mezquita , el principal monumento y templo de la diócesis en calidad de propietario. Y las cuentas del Cabildo explican hasta qué punto ha sido grande la falla producto del movimiento de placas tectónicas generado por la aparición del Covid. Tanto, que ha obligado a los canónigos a una operación extraordinaria de deuda con el objetivo de mantener las obligaciones y a seguir con la actividad cada vez que se ha podido para animar a los negocios del entorno a seguir abiertos.
El Cabildo tiene un completo portal de transparencia donde realiza publicidad activa de sus datos principales. Anualmente, cuelga los datos de su contabilidad, la memoria de gestión realizada y los convenios de colaboración que tiene vigente en las más variadas materias. Se trata de una vacuna contra quienes acusan a la organización eclesiástica de gestionar los dineros que genera la Mezquita sin luz ni taquígrafos.
El ente propietario de la Mezquita-Catedral facturó cuatro millones de euros redondos en 2020, la gran mayoría procedente de los ingresos turísticos (3,7 millones de euros) y el resto procedente de fuentes financieras (el rédito generado por los activos propiedad de la institución eclesiástica).
Se trata de una cantidad minúscula para lo que suele registrarse por la venta de entradas de los distintos formatos posibles (visita normal, pases nocturnos y entrada a la torre son los conceptos principales).
Estado de alarma
La explicación del bajón es el impacto del virus. En marzo de 2020, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , decretó el estado de alerta por la aparición de un virus respiratorio que había tenido los primeros casos varios meses antes en la ciudad china de Wuhan .
Desde entonces, el Cabildo ha intentado mantener todos los compromisos posibles en materia de rehabilitación del patrimonio y colaboración en materia social que ha sido posible aparte de pagar los salarios de sus trabajadores a pesar de que la Mezquita ha tenido una actividad muy por debajo de la normalidad por la imposibilidad de moverse entre territorios.
Según la memoria económica, el Cabildo tuvo unos gastos de 13 millones de euros durante todo el año 2020. La cuenta es sencilla. Las pérdidas en las que se incurrieron durante el año fiscal fueron de nueve millones de euros en términos redondos. En el año fiscal, se mantuvo una partida superior a tres millones de euros para rehabilitación patrimonial e investigación arqueológica y otros tres millones de euros para asistencia social tanto en Córdoba como en el plano de cooperación internacional.
El Cabildo está financiando la reforma del Palacio Episcopal, al que dedicó cerca de dos millones de euros, donde ya está casi concluido el trabajo de creación de un Centro de Recepción de Visitantes de la Mezquita-Catedral.
El apuro
¿Cómo se salvó el apuro? El Cabildo decidió no deshacer activos (lo que suele ser costoso cuando se aplican penalizaciones) sino que acudió a la banca para una financiación extraordinaria. El informe de resultados destaca que se realizaron dos operaciones de cinco millones de euros cada una, diez millones en total, para garantizar los gastos a corto y medio plazo. La operación se hizo, y esta es la parte divertida, con Cajasur.
El Cabildo fue el propietario de la antigua caja de ahorros hasta su intervención por el FROB y venta al grupo financiero vasco BBK (hoy Kutxabank).
En un año normal, el Cabildo presenta unas cifras bien diferentes. Si se toma un año bueno para el turismo, como el de 2019, la organización eclesiástica generó unos ingresos y unos gastos de 17,5 millones de euros. El 95 por ciento del total vino de la venta de entradas, el espectáculo nocturno, colectas y derechos sobre filmaciones entre otros conceptos.
La realización de la operación extraordinaria de deuda no debe suponer un problema: el Cabildo tiene una posición de pasivos bancarios muy cómoda
Los gastos generados fueron de 15 millones de euros que genera la Mezquita-Catedra l . El Cabildo no es una sociedad mercantil a la que se le puede imputar los conceptos de beneficios y pérdidas. Sin embargo, una simple resta explica que el excedente ascendió a 2,5 millones de euros. En las cuentas de 2018, el concepto de «capacidad de financiación», lo que se queda limpio para reservas e inversiones, fue de 4,1 millones de euros.
Las obligaciones
Las cuentas del Cabildo explican que las obligaciones ordinarias relacionadas con el personal se han abonado en su integridad tanto en 2019 como en 2020 (de hecho, han crecido unos 300.000 euros), lo que implica que no se han adoptado medidas de contención del gasto, tipo expediente de regulación de empleo. A esas cuantías, hay que sumar la partida de vigilancia del monumento , que computa aparte. La seguridad del complejo costó un millón de euros en 2020.
La realización de la operación extraordinaria de deuda no debe suponer un problema para el Cabildo si el mercado turístico vuelve a su ser en un plazo de tiempo razonable. La razón es que la entidad tenía, con carácter previo a esas operaciones, una posición de pasivos bancarios muy cómoda.
La memoria no explica cuál es el monto total pero sí afirma que los gastos de amortizaciones anuales ascendió de 250.000 euros. Es como si una familia dedicase el 2 por ciento de sus ingresos anuales a pagar la hipoteca de la casa y el crédito del coche.
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