EL CAMPO
En busca de subvenciones a la medida del cultivo andaluz
Las propuestas de Andalucía para la modificación de las ayudas llegarán a Bruselas a finales de este mes
El paquete de alegaciones tras la revisión del Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Andalucía del marco actual (2014-2020) se centra, en buena parte, en las ayudas agroambientales. Asaja ha transmitido al Gobierno andaluz sus propuestas de modificación de las medidas de Agroambiente y Clima , con el objetivo de que sean más accesibles y lleguen a más agricultores y ganaderos. Estas propuestas viajarán a Bruselas a finales de julio y será la Comisión europea quien tendrá la última palabra sobre su inclusión en el PDR.
La ayuda agroambiental específica para la dehesa, denominada «Conservación y Mejora de Pastos en Sistemas de Dehesa» ha sido una de las ayudas del nuevo PDR más esperada por los ganaderos de extensivo, que han acogido con sorpresa que la normativa excluyera a la ganadería ecológica de la posibilidad de recibir una prima de hasta 131,26 euros por hectárea para la siembra de especies pratenses destinadas a mejorar la calidad del suelo y la capacidad de retención de agua en la dehesa.
Por ello, Asaja Andalucía critica la incompatibilidad de la ayuda a la siembra de pratenses con la ganadería ecológica, alegando que «precisamente el incremento de producción que conlleva la implantación de praderas contribuye notablemente a reducir la dependencia de las explotaciones extensivas de alimentos del exterior, que es el mayor riesgo para la actividad ecológica».
La patronal agraria recuerda «la alta implantación de la ganadería ecológica en Andalucía» y señala que «esa incompatibilidad llevará a que muchas explotaciones no puedan acogerse a la actuación más interesante para conseguir una inversión de flora y, con ello, lograr el objetivo final buscado en la operación agroambiental».
Respecto a la ayuda de Sistemas Sostenibles de Cultivos Herbáceos de Secano , cuya convocatoria está prevista para 2017, la patronal agraria considera imprescindibles modificar el diseño de esta ficha que establece, como requisito de admisibilidad, que la pendiente media del recinto que vaya a acogerse a tal ayuda sea superior al 8%. Esta exigencia «limitaría enormemente la implantación de esta medida en las zonas de campiña donde el objetivo de esta medida debería ser prioritario», alega Asaja, quien propone «eliminar la exigencia de pendiente mínima», recomendando que «podría pasar a ser un criterio de prioridad y no un criterio de admisibilidad».
