EL ESTILISTA
La burocracia inventada
Todas las obras importantes de la humanidad fueron en soledad
Para una idea buena que tiene la Junta y se la estropean sus servicios jurídicos. El servicio jurídico es como el médico de cabecera: siempre dispuestos a quitarnos la alegría de vivir. Porque ustedes dirán lo que quieran y el Tribunal Constitucional lo que deba, pero a mi me parece que lo de la compensación horaria casera es una propuesta realista y de alcance . Al cabo, la civilización se traduce en trabajar según el propio criterio, no en trabajar menos. Un individuo en su hogar es una fuente inagotable de creatividad y además un ahorro. El trabajo en equipo es un gran mito , una monumental engañifa social que solo sirve para jugar al fútbol y para montar partidos políticos. Todas las obras importantes de la humanidad se han hecho en soledad, en la íntima buhardilla de cada uno, pensando. ¿De verdad considera alguien que se pueda pensar en equipo? En equipo se desbarra, se agrede o se conspira, ni siquiera se vota -porque el voto es personal y secreto-, pero por supuesto nunca se piensa. Con la esclavitud acabaron las máquinas, que resultaron ser más productivas que la mano de obra y permitieron al productor estar mano sobre mano durante algún tiempo. La robotización plena le permitirá estar mano sobre mano casi todo el tiempo. Y la informatización debiera permitirle estar así en casa. El teletrabajo es el futuro . Individuos pensando en libertad. No hay otro probable ni apetecible. Es la gran revolución pendiente. Y la Junta de Andalucía había dado un paso significativo en esta dirección.
Lástima que haya reculado. No por las garantías jurídicas ni por el problema del control del horario laboral externo, que son cuestiones menudas, sino por la estimación postrera de que tal acción haría que se notase, sin duda demasiado, lo prescindible que es ese tiempo computado para la administración andaluza, o para cualquier otra. Es decir, que en el fondo implicaría el reconocimiento del sobrante administrativo y de la burocracia inventada , absolutamente innecesaria, que conlleva. La administración es un gigante sin cabeza. Funciona sola, funciona pese a quienes la dirigen, funciona desmedidamente, retroalimentándose, buscando justificaciones en sí misma, complicándose para crecer, reinventándose cada día para sobrevivir frente a los avances tecnológicos que debieran mermarla. Incluso ha conseguido que en la era de la informática se genere más papel que en la de los manguitos funcionariales. No obstante, la senda está marcada. Antes o después, todo el mundo se dará cuenta de que la administración debe ser un ente sencillo , que no puede estar para dar trabajo, sino para quitarlo y, en todo caso, para que lo den otros, a ser posible también en casa. Y todos estaremos tan ricamente en ella. Como hoy, que para eso es Nochebuena. De modo que aprovecho la ocasión para corresponder al detalle de Esther Ruiz y desearle una feliz Navidad a nuestra delegada de Gobernación y, por tanto, primera funcionaria de la Junta de Andalucía en Córdoba. Espero sinceramente que acierte en sus difíciles cometidos. Puesto que confío en que conoce, como nadie en esta ciudad, la raíz del problema.
