FESTIVIDAD DE TODOS LOS SANTOS
Un brillante «puente» que trae el turismo a Córdoba
Los monumentos tuvieron una buena afluencia, con colas, sobre todo en el Alcázar, y los hosteleros hacen buen balance
Las previsiones turísticas para Córdoba para el ciclo festivo de Todos los Santos eran buenas -los hoteles esperaban altísimos niveles de ocupación- y se están haciendo realidad . Al menos, eso se deduce de la imagen que presentaban ayer los monumentos , con el lunar de nuevo del horario del Ayuntamiento para sus museos y el Alcázar , y de las opiniones de la hostelería. El puente de los difuntos ha tenido vitalidad, ayudado por el hecho de que la climatología finalmente haya acompañado, para atraer aquí a un enorme número de viajeros vivos.
A eso de las diez y media, la Mezquita-Catedral calienta motores . Los grupos empiezan a llegar, pero la joven pareja de ciudadrrealeños formada por Sergio y Beatriz ya tiene hechos los deberes de gozar de la joya de la corona de Córdoba. «Es algo digno de ver», sentencian. En su primera visita a la capital, ya han visto el Alcázar y la Torre de la Calahorra y ahora van a ir a Medina Azahara. «Córdoba está bien, está bien», repiten, mientras se disponen a apurar el tercero de los cuatro días que pasarán por estos lares.
Aunque el puente supone una importante afluencia de visitantes nacionales, el Patio de los Naranjos sigue siendo una bella y pequeña ONU. Así, cuando este periodista le plantea a un joven que sale de la Mezquita-Catedral si le ha gustado, escucha un apresurado y a la carrera «molto [mucho]».
En taberna Santos empiezan a despachar tortilla a la velocidad a la que se ha ido el viajero italiano. Su gerente, Jesús Maldonado, asegura que los días de puente están siendo «buenos» . «Mientras no haya mal tiempo», los ciclos festivos siempre son positivos para el negocio, defiende. «Es como si fueran tres sábados y medio», añade. Por ello, indica que, si suelen hacer ocho o diez tortillas al día, ayer podían ser «15, 20, 22 ó 25», dependiendo de «la demanda».
Es hora de ir dirigiéndose a la Sinagoga , una de las grandes novedades del ciclo festivo de Todos los Santos -se reabrió el 30 de octubre tras someterla la Junta por once meses a obras de conservación-. A las doce , el templo hebreo ya deja patente su atractivo : la fila para acceder gana miembros . Jesús e Isa , una pareja de jóvenes gaditanos , han esperado su turno para disfrutar del remozado monumento y salen con la lección aprendida. «Nos han contado que ha habido una restauración», dicen, aunque hay en su tono un poso de decepción: «No nos la esperábamos tan pequeña, aunque es muy bonita».
Por el camino se cruzan a una joven que en la plaza del Museo Taurino le comenta a otras: «Hemos ido a ver la Sinagoga, pero había un colón...» . La fila llega a la estatua de Maimónides.
Aunque, si se quiere un sitio donde aguardar el turno se convierte en arte, ése es el Alcázar , al que le perjudica, como a otros hitos turísticos gestionados por el Ayuntamiento, su horario. Pese a ser puente, volvió a cerrar a las cuatro y media -a las cuatro fueron las últimas entradas-. ¡Y gracias! Porque el 1 de noviembre, festivo, echó la persiana a las 14.30 horas. Eso propicia las colas que sobre las doce y media ya son considerables . Las sufren, por ejemplo, Juan y Alicia, una joven pareja gaditana , que llevan «entre 40 y 45 minutos» haciendo fila . Acuden por primera vez a Córdoba y ven «mal» que no abra por la tarde en estos días festivos .
Dejar el Alcázar y buscar la opinión de la hostelería es viajar hacia la satisfacción. Un buen termómetro del sector es la opinión de Miguel Cabezas , gerente del reconocido Grupo Cabezas Romero (Casa Pepe, Casa Rubio, El Número 10 y La Lola). Asegura que «no hemos parado» en este ciclo festivo, que está siendo «fantástico» para sus negocios, con «predominio de público español». «Hacía tiempo que no hacíamos esta caja» , resume gráficamente.
Salir del radio de acción de la Mezquita-Catedral sirve para hacer pierna, y poco más. Porque la opinión que se recoge en la taberna El Paseo , abierta desde 1968 en la Cruz del Rastro, es también positiva. Su encargado, Jaime Alegría , señala que está siendo «un buen puente» . «Nuestras expectativas, que eran buenas, altas, se están cumpliendo», añade. Indica que, cuando se producen este tipo de festividades, se nota «muchísimo cliente español».