Base Militar de Cerro Muriano

General Olazábal: «La Brigada de Córdoba es una de las más resolutivas y modernas del Ejército en España»

En el calendario de la pandemia, el destacamento de Cerro Muriano cumple 35 años con los preparativos de nuevas misiones internacionales

El general Ignacio Olazábal posa con su uniforme de gala Valerio Merino

Rafael Verdú

Casi al mismo tiempo, Ignacio Olazábal Elorz recibió tanto el mando de la Brigada Guzmán el Bueno de Cerro Muriano como su ascenso a general de brigada. Ocurrió el 31 de enero de este año 2020, cuando el Boletín Oficial del Estado publicó su nombramiento al frente de la unidad acuartelada en Córdoba. El alto mando , nacido en Pamplona en 1964, tiene una amplia trayectoria militar de 36 años en el Ejército de Tierra, uno más de los que atesora la Bri X. El general cuenta con una dilatada experiencia también en misiones internacionales, que le servirá a buen seguro para liderar una unidad que ha estado este año en una misión en Letonia. Puede que la unidad no tarde en participar en más operaciones en el extranjero.

Se cumplen 35 años de la fundación de la Brigada Guzmán el Bueno y esta unidad se ha convertido en punta de lanza del Ejército de Tierra en España. ¿Cuáles han sido los puntos fuertes de su evolución?

Bajo mi punto de vista es de las unidades más modernas y resolutivas del Ejército , dotada con los medios punteros y tecnología de última generación, con misiles contracarro y antiaéreos, de lo más novedoso que disponemos. Pero sin duda alguna esto no sería así sin la calidad humana, técnica y moral de los hombres y mujeres que forman la unidad. Durante la operación Balmis [el despliegue de unidades militares durante la primera ola del Covid-19] demostramos que somos una unidad flexible y capaz de adaptarnos a los cambios que se han sucedido, cumpliendo con las misiones.

¿Y qué balance hace de su casi primer año al frente de la Brigada?

Destacaría dos cosas. Por un lado, la magnífica relación con la sociedad cordobesa , que ha sido una sorpresa para mí, con el apoyo y cariño que nos han mostrado durante este año. Por otro lado, destacaría la e xtraordinaria voluntad de servicio de los 3.300 hombres y mujeres que componen la unidad. La Brigada está para lo que sea y cuando sea.

¿En qué medida la pandemia ha trastocado los planes y programación de la Brigada?

Nosotros lo hemos vivido con la misma preocupación de todos y la misma incertidumbre por no conocer el alcance de la pandemia. Durante la crisis nuestro propósito ha sido mantener las capacidades y responder así a lo que se nos demandara. Ordenamos una serie de medidas preventivas para impedir la propagación, con una serie de «burbujas» que ante cualquier sospecha de contagio pudieran ser aisladas dentro de la unidad, preservando nuestra capacidad. También hemos adoptado una serie de planes de continuidad para mantener la actividad, redistribuyendo las tareas e incrementando nuestra capacidad de teletrabajo. También para el personal especialmente sensible y con patologías previas, para disminuir su riesgo y contacto, así como protocolos específicos con medidas preventivas de diversa índole, para mantener nuestra preparación y la seguridad.

¿Y cómo han vivido el coronavirus en la propia base? ¿Cómo se han articulado las relaciones laborales con los preceptivos protocolos?

Hemos adaptado la instrucción a todas las medidas que ha adoptado la sociedad. Una vez que fuimos requeridos para apoyar a las autoridades civiles, la actuación se circunscribió en el conjunto de todas las Fuerzas Armadas. Se ha mostrado como una herramienta útil y eficaz y esto es importante. La impresión es que somos una herramienta más de la acción del Estado. La Bri X estuvo presente en todo los municipios de Córdoba y Jaén , por lejanos que estuvieran, mostrando la presencia del Estado. Una cosa buena es que la población ha percibido que la presencia del Ejército en las calles es normal, una herramienta más.

Su labor durante la primera ola y el estado de alarma, con la presencia en las calles, además de ser elogiada por la sociedad dejó una sensación de que sería bueno verles más en estas tareas, aunque esté la UME. Sobre todo en la segunda ola, cuando se ha echado en falta cierta disciplina social con las normas. ¿Cuál es su opinión al respecto?

Nosotros actuamos respecto a lo que se nos demanda, ni más ni menos. Son las autoridades civiles quienes gobiernan y quienes deben recurrir a todas las herramientas de que disponen. Nada nos honra más que contribuir con los medios que la sociedad nos ha entregado y poder usarlos en ayuda de la sociedad que nos los entregó en su momento.

El general en su despacho Valerio Merino

¿Está trabajando ya la Bri X en su próxima misión internacional?

Estamos inmersos en el plan del Ejército y nuestra obligación es estar preparados para poner nuestras capacidades en la cadena operativa. En 2021 no está previsto el despliegue en el exterior , pero iniciaremos la preparación para un despliegue en Líbano y Letonia , por si la Brigada es asignada a estos escenarios.

¿Cuál es el marco estratégico general en el que se está moviendo ahora la OTAN, siendo la Brigada ya una parte de su capacidad de respuesta?

Esto se sale fuera del ámbito de la Brigada, puesto que nosotros somos una herramienta táctica , de respuesta inmediata. Dentro de la contribución española que hacen las Fuerzas Armadas a nuestros aliados, estamos presentes en la iniciativa de respuesta avanzada de la OTAN en Letonia, para lo que nos estamos preparando otra vez.

¿Ha cambiado la pandemia la lectura del tablero geopolítico internacional avivando nuevos conflictos o no tanto?

Desde mi punto de vista no ha variado significativamente. Los conflictos en entornos grises persisten, la amenaza yihadista global nos obliga a dar apoyo a estos países más débiles que se encuentran amenazados. Hay un proyecto experimental, el Ejército 2035, en el que estamos estudiando cómo deben ser las fuerzas armadas en un futuro no tan lejano, para responder a todos estos condicionantes operativos en que no veremos envueltos. El Ejército de Tierra está desarrollando un ambicioso programa, en el que colaboran todas las unidades, para ver cómo debe ser una brigada.

Decía el general Lázaro, su antecesor, al marcharse en una entrevista en ABC que la Brigada debía estar al final de 2020 en su mejor nivel de preparación. ¿Es así?

Sí, clarísimamente. El adiestramiento no se puede improvisar . Son unos planes a tres años en los que vamos cumpliendo unas etapas para que al final estemos en las mejores condiciones para asumir los compromisos operativos del exterior. Este año empezamos con el despliegue en Letonia y hemos superado los hitos marcados. Hemos tenido una participación trabajosa en el Ejercicio Toro y nuestro cuartel general entiende que estamos en un nivel óptimo. Nuestra contribución a la Misión Baluarte [el apoyo militar en las labores de rastreo] y Balmis nos han proporcionado un plus de preparación en otra de nuestras misiones, el apoyo a las autoridades civiles en caso de necesidad.

¿Cuáles son las necesidades de la Base en estos momentos? Siempre han hecho una extraordinaria optimización de recursos, pero echarán en falta medios...

La Base de Cerro Muriano es una de las más extensas de España , lo que nos obliga a hacer un esfuerzo de mantenimiento. Al frente de una base tan grande los recursos son escasos, siempre me gustaría tener más medios para tener más calidad de vida de las tropas alojadas. Nosotros optimizamos al máximo los recursos para facilitar las condiciones de trabajo.

¿Siguen apreciando un vivo interés por enrolarse en el Ejército profesional pese a factores como la caída de la natalidad o la inmigración?

Pese a esos factores el interés va en aumento , y esto se refleja tanto en el número de los aspirantes como en el nivel profesional de los que se presentan. Hay aumento constante de notas de corte en las academias, que se eligen en función de la antigua Selectividad. La ofertas de plazas han tenido un gran número de aspirantes.

¿Y ve en las generaciones futuras un estímulo suficiente para que el refresco generacional llegue al Ejército Español?

Lo tenemos asegurado con estas cifras. Vienen por detrás y empujando . Hay muchos y muy buenos aspirantes, quizás mejores que los que ahora estamos . Vienen de lo mejorcito que la sociedad española está proporcionando. Mi labor debe centrarse en ser capaz de mostrar a la sociedad, que nos manda sus aspirantes, que esto es una profesión noble, necesaria y útil a la sociedad. Hay que convencer a los aspirantes de que somos una herramienta útil que proporciona seguridad, que es fundamental para la convivencia. Como dijo Calderón, esto es una religión de hombres honrados, de la que nos sentimos orgullosos de servir a España y al Rey con la noble profesión de las armas.

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