MUNICIPAL
El Ayuntamiento de Córdoba puede perder casi la mitad de la subvención del Estado para a obras
El retraso de «Mi barrio es Córdoba» pone en jaque percibir los 2,5 millones íntegros del Gobierno central
El Ayuntamiento de Córdoba se arriesga a una pérdida considerable de dinero como consecuencia del fuerte retraso acumulado por el plan de obras Mi barrio es Córdoba y, en concreto, la parte del mismo que se va a financiar con 2,5 millones de euros del gobierno central. El portavoz del PP, José María Bellido, explicó ayer que si el plazo para certificar obras se hubiera cerrado, el Consistorio perdería 1,2 millones de euros , casi la mitad del dinero.
El Gobierno central, anunció, ha dado doce días más al equipo de Isabel Ambrosio para que pueda presentar actuaciones. Los cálculos, según la versión del cogobierno, no son en absoluto erróneos. Bellido cargó contra el equipo por haber cometido un error de gestión que le va a costar el dinero a los cordobeses al tener que aportar fondos de su presupuesto de lo que pagaba el Ejecutivo.
La delegada de Infraestructuras, Amparo Pernichi (IU), no quiso dar una cifra concreta pero aseguró que en estos momentos todas las actuaciones cubren un cuarenta por ciento de lo establecido por el Gobierno de Madrid. La clave se encuentra en la lluvia. Si el tiempo respeta, el equipo municipal podría llegar a un sesenta por ciento de los 2,5 millones de euros . Una cantidad muy baja, según se reconoce en el gobierno y en la oposición. Sobre todo, teniendo en cuenta el origen de la partida.
PSOE e IU zurraron de lo lindo al PP cuando este grupo parlamentario decidió, perdido el poder, convertir la partida de 5,5 millones del anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado en 2,5 millones. Las declaraciones de aquellos días se vuelven ahora en material inflamable contra el equipo de gobierno si, como se convirme, no es capaz de gastarse en torno a la mitad del dinero presupuestado por razones de gestión interna.
Pernichi reconoció ayer, como lo ha hecho en otras ocasiones, que solamente las bajas de las ofertas recibidas explican una parte del dinero que no se va a poder gastar. La otra tiene que ver con los problemas de personal para licitar los contratos (los mismos que tuvo el PP) y, fundamental, que los créditos municipales para financiar inversiones no estuvieron hasta el mes de septiembre. Dado que se trata de actuaciones cofinanciadas , esta partida era necesaria para que las licitaciones se pusiesen en marcha.