PRETÉRITO IMPERFECTO
Aumente
Emilio Aumente ha sido este tiempo la oposición en el pastiche oficial de Ambrosio, García y el ente podemita
El mejor balance político del mandato municipal y el año que resta lo ha hecho Emilio Aumente , concejal socialista responsable de Seguridad en el Ayuntamiento. El edil ha estallado con un problema de personal en los Bomberos y ha puesto su cargo a disposición de la alcaldesa si no se toman medidas urgentes sobre el particular. El órdago llega pocas horas después de un incendio en una caseta de Feria y arrastrando serios problemas con la Policía Local durante todo el Mayo festivo . «Córdoba no saldrá de donde está con políticos como estos», ha dicho. La frase es demoledora. Pronunciada desde dentro. Entraña cierto aire de ventaja: el señor Aumente se nos jubila en un año y para lo que le queda en el convento... Cabría puntualizar a su valentía que el pálpito no es nuevo, por lo que ha podido ser elevado a la categoría de máxima mucho antes que ahora, con lo que la potencia discursiva y ejemplarizante de este veterano político local se diluye en parte. Aumente tiene un puesto de trabajo fuera de la política: pudo haber prendido la llama mucho antes . Pero optó por la disciplina de partido. De momento, doña María Isabel Ambrosio ha apagado el fuego prometiendo de urgencia la contratación de efectivos. Se antoja llamativo que con esa solvencia no lo haya hecho antes, o por el contrario, estamos ante un regate corto para salvar el incendio mayúsculo .
Este delineante ha dado la justa medida de lo que habita el interior del cogobierno municipal . Una construcción política amorfa, roma de gestión y alejada de la realidad y los intereses o preocupaciones de la ciudad que se supone tenían que gobernar. Aumente ha sido la oposición en el pastiche oficial de Ambrosio , García y el ente podemita . Su «calentón», como vino a definir la alcaldesa, ha sido a fuego lento. Ensambló la carrera oficial en el entorno de la Mezquita-Catedral con la regidora de perfil por si se estrellaba, el entorno político-vecinal echando leña, el displicente concejal de Izquierda Unida , con responsabilidad en Turismo, bombardeando el invento y lanzando el mensaje de que el recinto era inseguro; y los amigos de Pablo Iglesias y su chalé de lujo criticando la «privatización del espacio público». Como para que el señor Aumente no sepa de Bomberos a estas alturas con tanto pirómano dentro de la Junta de Gobierno Local . Como el nuevo itinerario ha sido un logro, todos a colgarse las medallas, claro está. Ha habido veces que se ha entendido mejor con los canónigos que con los camaradas de bancada . Y eso tampoco se lo perdonan.
Aumente siempre fue visto por Ambrosio como el hombre de Durán en la planta noble de Capitulares. Un topo. Pero para no ser de la cuerda de doña María Isabel, y tampoco ser propenso al omeprazol, ha demostrado tener sentido común suficiente como para anteponer los intereses de todos los cordobeses a los particulares ...,aunque haya sido un poco tarde, repito. Y hoy en día es ese ejercicio de sentido común el que más se valora por los ciudadanos en cualquier parte, asqueados de todo lo demás. Probablemente, otro concejal con la misma responsabilidad y a estas alturas de la precampaña electoral , jugándose el puesto en la lista de 2019, hubiera aguantado el chaparrón de los bomberos con pellejo y hubiera seguido el relato oficial o el silencio sepulcral .
Córdoba lleva demasiado tiempo con «políticos como estos» , que por otro lado, pudieran ser los merecidos por una sociedad indolente y huérfana de ambición y compromiso, sin una idea común y compartida de la misma ciudad. Al menos hay que agradecerle a don Emilio este soplo de aire fresco .
