Asaja exige al Gobierno acabar con el «agravio» de los regadíos en la cuenca del Guadalquivir

La situación por la que atraviesa la agricultura y la ganadería por la falta de lluvias , en puertas a una probable declaración de sequía si el otoño no viene lluvioso y se remonta la situación, hace que las reivindicaciones para exigir mejoras y compensaciones estén en el orden del día. La patronal agraria Asaja Córdoba vuelve, por enésima vez, a exigir a las administraciones públicas que solucionen el déficit de agua para los regadíos de la provincia. En un comunicado, la asociación que preside Ignacio Fernández de Mesa, informa de que se ha dirigido al Gobierno central para que cumpla con las «demandas históricas» del sector para incrementar los regadíos en Córdoba y ha exigido que se corrija el «agravio sufrido por el campo cordobés» al ser la provincia de la cuenca del Guadalquivir que «más agua almacena y la que menos regadíos tiene».

Asaja expone que la gran demanda, transmitida por escrito al Gobierno y a la Junta de Andalucía , es la necesidad de ampliar regadíos en Córdoba para garantizar un futuro a las explotaciones de la provincia.

La patronal agrararia indica que la provincia es la que más agua almacena de la cuenca del Guadalquivir (un 49,55 %) y la que menos riegos tiene (un 16,83 %), mientras que también es la que menos porcentaje de olivar en riego posee (solo un 14,39 %) a pesar de ser la segunda en superficie de olivar.

Por tanto, se trata de una situación que «empobrece nuestras zonas rurales debido a la penosa situación de los cultivos de secano, que hace que sólo los riegos sean competitivos», indican desde Asaja.

En Córdoba, según datos de la Consejería de Agricultura , se han dejado de usar desde los años 90 un mínimo de 228 hectómetros cúbicos que procederían de las zonas regables del Guadalmellato , Guadajoz , riegos con toma directa y Genil Cabra , entre otras, y daría para poner 150.000 hectáreas de olivar en riego.

También se ponen «todo tipo de trabas a la construcción de balsas y microembalses », en muchos casos por la «falta de coordinación entre la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y las consejerías», señala la patronal agraria.

Además, añade que no se soluciona el problema del tapón salino que, con 150 millones de euros estaría resuelto y se liberarían otros cerca de 100 hectómetros cúbicos, mientras que tampoco se finaliza la zona regable del Genil-Cabra , según estaba prevista, y no se dan ayudas a modernizar los riegos con toma directa del Guadalquivir.