Baltasar López - Primera Plana
«Arturo» Ambrosio y el nudo logístico
La «reina» avanza con la clásica calma de nuestros dirigentes. No hay calendario para materializar su primera batalla propia
La reina, Isabel Ambrosio I del PSOE , ha dedicado más de año y medio a guerrear en el Ayuntamiento contra los proyectos heredados del PP . Poco bagaje para quien aspira a volver a ceñirse la corona en 2019. Por ello, se ha agenciado una batalla propia que librar con la que intentará conquistar un hueco en los cantares modernos de las redes sociales y escribir un párrafo en la historia local. ¡Se hace saber que su majestad entablará descomunal contienda para lograr que Córdoba sea… una ciudad logística ! Sí. Sé que la poseedora del cetro y su séquito abdican de la originalidad. La bandera que se les ocurre izar para pelear por ella es un pendón deshilachado por 30 años de oportunidades perdidas.
Porque la conversión de la capital en un potente polo distribuidor de mercancías, aprovechando su excelente ubicación geográfica y sus conexiones de transporte, ha hincado la rodilla demasiadas veces. Los restos yacen en el campo de batalla: un parque logístico de la Junta que se ocupa por empresas a un ritmo lentísimo y sin que las Administraciones autonómica y central den el paso vital de conectarlo con el tren; un aeropuerto en el que el Estado se gastó 80 millones para su reforma y no tiene dimensiones para acoger vuelos que lleven productos de un lado a otro…
Aunque se atisba una derrota segura -más con los empresarios del reino de Antequera moviéndose bien en esta materia, con apoyo del Ejecutivo regional-, nuestra monarca encargó por 20.570 euros a unos sabios de Cataluña ( Cimalsa ) un informe. El documento nos dijo lo que sabíamos: que tenemos gran potencial logístico, pero no parece que nos vaya a ayudar a explotarlo por fin. Porque Ambrosio lidera sus huestes con la habitual parsimonia de nuestros dirigentes que no se han enterado aún de que miles de paisanos pelean cuerpo a cuerpo con el paro. Su primera orden ha sido crear una comisión. Después, ha desplegado unos planos llenos de planes que suenan a más de lo mismo: Urbanismo intentará facilitar que haya grandes parcelas (las que necesitan las firmas que distribuyen mercancías con intensidad); cerrar acuerdos con puertos andaluces; orientar el aeropuerto al turismo (si llega a anunciar cómo hacerlo, me quito el yelmo ante ella); o facilitar la implantación de actividad económica.
Por supuesto, nuestra reina no dio un calendario para materializar esta ofensiva. Se limita a presentarse ante su pueblo como un Arturo que podrá desenredar el nudo logístico , una maraña tejida durante décadas de trenes pasando de largo y en la que ya se asfixiaron otros responsables públicos. Espero que venza en una guerra que veo imposible que gane. Ojalá, deje ese perfil más plano que el de un folio que cultiva y se implique en la contienda que acaba de iniciar. Como buen súbdito, me prohíbo pensar que se haya gastado 20.570 euros sólo en empezar a promocionarse para su juego de tronos de 2019.