SUCESO
Arranca el derribo de la vivienda afectada por la explosión de gas en Pozoblanco
Tras la demolición se apuntalarán la viviendas aledañas para que puedan regresar las cuatro familias desalojadas
La casa afectada el pasado domingo por la explosión de gas en la calle Nuestra Señora del Rosario de Pozoblanco comenzó a ser demolida ayer. El derrumbe de la vivienda fue anunciado después de valorar la situación de deterioro en la que quedó el inmueble y de esa acción dependía directamente el que las cuatro familias desalojadas de sus respectivas viviendas puedan volver a las mismas.
Algo que no ocurrió en el día de ayer al no haber concluido los trabajos, ya que todavía queda por derruir parte de la vivienda afectada asi como apuntalar los inmuebles afectados para garantizar la seguridad. Las familias afectadas se han realojado en casas de familiares y amigos a excepción de una que permanece en un establecimiento hotelero de la localidad.
La demolición se inició sobre la cinco de la tarde de ayer lunes después de que por la mañana se estudiará el acceso con las máquinas a la vivienda más afectada de la manera más segura posible.
Así, una vez planificado y acordado todo, la Policía Local controló la zona para evitar el paso de los vecinos acordonando una zona en la que hubo mucho movimiento durante toda la mañana con la presencia de técnicos, de los propios vecinos y también de medios de comunicación. Los vecinos, además, siguieron de cerca los avances de los trabajos de demolición, así como cualquier tipo de noticia, ya que esperan poder volver a sus casas en el menor tiempo posible.
Entre las personas que siguieron estos trabajos también se encontraba el único herido que dejó la explosión, un varón que sufrió quemaduras de primer grado en las manos y una contusión frontal por lo que fue ingresado en el Hospital de la localidad , aunque recibió el alta el mismo domingo ya que afortunadamente las heridas no revestían gravedad.
Fuga de un brasero
Hay que recordar que la explosión de gas dejó importantes daños materiales en hasta cinco viviendas, principalmente en la que tuvo lugar el posible escape de gas de un brasero que sería la causa de la explosión. El suceso tuvo lugar el domingo por la mañana y el desalojo de los vecinos fue una de las primeras medidas que se tomaron debido a esos importante s daños materiales y al serio peligro de derrumbe inmediato que afectaba a la zona lo que llevó a que la Policía Local precintara las viviendas y comunicara a los vecinos afectados, aproximadamente unos diez, que sería imposible regresar a sus hogares.
El incidente tuvo lugar sobre las siete y media de la mañana cuando se dejó escuchar un fuerte ruido que alertó a los vecinos de la zona. «La verdad es que nos sobresaltamos porque el ruido fue muy grande», explicó a ABC una vecina mientras esperaba conocer si podían o no entrar a su vivienda.