Perdonen las molestias

Insumisos

Donde los infectólogos observan una pandemia como la copa de un pino, ellos ven una conspiración planetaria

Un hombre compra gel de protección en una farmacia VALERIO MERINO
Aristóteles Moreno

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una vez que hemos metabolizado la esotérica medida de las mascarillas en exterior, detengámonos en el arquetipo de los insumisos. Primero centrémonos en los negacionistas. Todo un clásico. Esos seres que miran la realidad al modo en que N icole Kidman habitaba en la penumbra de la mansión de ‘Los Otros’ . Donde los infectólogos observan una pandemia como la copa de un pino, ellos ven una conspiración planetaria para cualquiera sabe qué propósitos inconfesables. De pronto, un día se despiertan en la UCI y la realidad se les da la vuelta como un calcetín.

Luego están los cabreados. Los que desafían el absurdo decreto del señor Sánchez porque simple y llanamente están hasta las pelotas del laberinto indescifrable en que se ha convertido el BOE . Hay una lógica aplastante en su razonamiento (y en su hartazgo), que se puede resumir con la metáfora del motorista que camina con el casco puesto por la calle y se lo quita para conducir la Yamaha de 750 centímetros cúbicos. Se les puede identificar claramente cuando caminan sin mascarilla por la avenida del Gran Capitán . Son los del ceño fruncido y el paso marcial como si fueran a reclamar la última factura de la luz.

El tercer grupo es la hostia en verso. Hasta antes de ayer llevaban mascarilla por la calle como norma profiláctica contra el covid . Ahora se la han quitado precisamente porque el señor Sánchez les ordena que se la pongan. Son insumisos por antonomasia. En estado puro. Si el Gobierno dice A, ellos hacen B. Da igual si se trata de la ley antitabaco que de la selección de residuos sólidos urbanos. Tiran la bolsa de gusanitos al suelo y usarán coches de combustión hasta el día en que el planeta alcance la temperatura de un horno de panadería. Se pueden ver apostados junto a la Comisaría de Policía del Doctor Fleming para que se note que no conocen la palabra miedo. Todas las encuestas indican que ya superan el 15 por ciento del electorado con holgura.

El resto simplemente cumple la ley. Aunque en algún pliegue de sus circuitos neuronales tengan la convicción de que la mascarilla en exteriores es una soberana sandez que no se le hubiera ocurrido ni a la mismísima Díaz Ayuso .

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación