CULTURA
Un archivo poético para Córdoba, en el aire
El legado del creador Manuel Álvarez Ortega espera a la iniciativa del Ayuntamiento para acogerlo en la Casa Góngora
El legado del poeta cordobés Manuel Álvarez Ortega , que donó antes de morir a su ciudad de nacimiento, sigue en el aire a la espera de que el Ayuntamiento tome la iniciativa para ubicarlo en la Casa Góngora . Así lo señaló ayer Juan Pastor, presidente de la fundación que lleva el nombre de este poeta, y que estuvo presente en la presentación de un ciclo sobre su figura.
Fallecido hace dos años en Madrid, ciudad en la que vivió, «a pesar del amor que siempre sintió por París y Córdoba», en palabras del poeta y exministro de Cultura César Antonio Molina , Álvarez Ortega, que fue candidato en dos ocasiones al Nobel de Literatura , decidió legar su archivo a la ciudad de Córdoba tras su muerte. En él se incluye «un cuerpo importante y bien ordenado de cartas de los poetas franceses a los que tradujo», según Molina, quien abrió con una conferencia el ciclo que dedica a Álvarez Ortega la Cátedra Góngora .
«No hay muchos poetas españoles de su generación que tengan ese diálogo con la poesía francesa », abundó Molina para resaltar el valor de ese legado relacionado con su labor traductora de poetas galos de vanguardia como Lautréamont, Laforgue, Saint John-Perse, Eluard , Breton , Segalen, Jarry y Apollinaire .
Según Juan Pastor, presidente de la Fundación Manuel Álvarez Ortega y amigo personal del poeta, el diálogo con el Ayuntamiento para realizar la donación se inició en 2012. Antes de la muerte del autor se llegó a un compromiso para que la Casa Góngora acogiera la documentación . «Al final se me ofreció la Casa Góngora, vine a verla, hablé con Manuel, que lo aceptó, y le comuniqué al Ayuntamiento su acuerdo en el 2014, poco antes de que él muriera. Las últimas palabras suyas fueron «¿y Córdoba?», y le dije que estaba todo controlado», recordó Pastor, que aseguró tener el ofrecimiento para colaborar de la actual teniente de alcalde de Cultura, Mar Téllez . «Me dijo que el Ayuntamiento había cambiado, pero no ha cambiado, habrán cambiado las personas. El Ayuntamiento sigue ahí y hay un compromiso con una carta en la que se ofrecía la Casa Góngora, ahora no sé a quién le corresponde la iniciativa», afirmó.
Por su parte, Mar Téllez aseguró durante la presentación del ciclo que éste puede ser «el inicio de la profundización en el conocimiento de su obra» y afirmó que «el Ayuntamiento está comprometido con el legado de Álvarez Ortega». César Antonio Molina, amigo personal de Álvarez Ortega y patrono de su fundación, recordó el carácter peculiar del autor y su deseo de « que Córdoba lo quisiera ». Para Molina, Álvarez Ortega era «un exiliado a su propio mundo, el de la poesía, y en él dejaba entrar a muy poca gente». El ex ministro de Cultura afirmó que «nunca quiso ningún premio».