LA CUARESMA EN ABC
Ricardo Ruiz Baena, Cofrade Ejemplar de Córdoba: «El apoyo de la familia es imprescindible»
Habla en una entrevista sobre su trayectoria y el compromiso de los hermanos de uno y otro tiempo
Ricardo Ruiz Baena confiesa que pasó sus mejores años de cofrade como hermano mayor de Ánimas , a la que ayudó a resurgir tras una desorganización en los años 60. También trabajó en la Expiración, en la Agrupación de Cofradías y ahora en San Rafael. Afronta este 2019 como Cofrade Ejemplar y reconoce que no lo esperaba: «Cuando llega el momento y lo nombran me pasaba por la cabeza, pero no estaba en mi mente que pudiera ser ahora. Ha llegado y bienvenido es».
Para él es «la culminación de una vida dedicada a las cofradías , pero él no serlo no significa que no se haya trabajado». Sí, da más responsabilidad, pero ya la conoce desde que se hizo cargo de Ánimas, que estaba desorganizada. En una entrevista concedida a ABC habla sobre aquellos años y sobre la posibilidad de los cambios en una cofradía con un sello tan particular: «En aquella época nos pasaba por la cabeza si había que hacer algún cambio . Luego volvíamos a las raíces y sabíamos que nos distinguíamos por una serie de cosas diferentes y que cómo lo íbamos a perder».
«Los cambios en Ánimas se pasaron por la cabeza, pero sabíamos que tenía cosas diferentes»
Ahora trabaja más en la hermandad de San Rafael y ve la Semana Santa de Córdoba distinta: «Hay menos cofrades que estén identificados con las cofradías. Ha cambiado, porque también la vida ha cambiado. El mismo año que yo fui hermano mayor, unos meses antes me casé. Siempre he dicho que quien ha criado a mis hijas ha sido mi mujer, porque yo me dediqué en cuerpo y alma a Ánimas. Eso hoy es muy difícil. No es que la gente no quiera a su cofradía y a sus titulares, es que su tiempo está más limitado».
Por eso insiste en la necesidad del compromiso familiar para que todo cuadre: «Hay gente que da el paso adelante, con muchos sacrificios y disgustos familiares . Si no hay comprensión en la familia, difícilmente el cofrade puede hacerlo. El cofrade que está integrado en la cofradía es porque su familia le apoya. No puede ser que una persona se dedica a una cofradía si cada vez que va a un acto le cuesta un disgusto. La familia es imprescindible».