Los jóvenes cofrades arropan al Simpecado en el camino

Ni el viento ni la lluvia impidieron que medio centenar de integrantes de lo s grupos jóvenes de las cofradías cordobesas acompañaran a la hermandad del Rocío en la parada de la Lusiana. De esta forma, entre rezos, cante y baile, los jóvenes estuvieron velando el Simpecado del Rocío durante toda una noche de convivencia. Una iniciativa que cumple su segundo año y que demuestra el buen ambiente que existe entre los jóvenes de las corporaciones cordobesas.

Entre las hermandades participantes se encontraban la de la E xpiración, Sentencia, Esperanza, Paz, Socorro o Buen Suceso . A las siete de la tarde de este sábado, los jóvenes partían hacia la parada de la Luisiana. Debido al retraso que arrastraba la filial cordobesa, la expedición tuvo que esperar unos minutos la llegada de los peregrinos.

«Nos hemos bajado del autobús con muchas ganas, pero nos ha empezado a llover fuerte y nos hemos tenido que subir de nuevo», explicaba Rafa Ayuso, miembro del grupo joven de la Expiración , uno de los que desplazó más integrantes (8). A la llegada de la comitiva rociera, fueron los jóvenes los encargados de acompañar al Simpecado hasta el lugar de descanso.

Allí, se inició una noche de convivencia en la que no faltaron las oraciones, pero tampoco el cante y el baile típicos de la alegría del camino. No obstante, fueron los jóvenes desplazados los que velaron durante toda la noche el Simpecado de la filial cordobesa. Una velada en la que «más allá de las distinta formas que tenemos de vivir la fe las hermandades de penitencia y de Gloria, demostramos nuestra unión con esta convivencia», concluye Ayuso.