Cuando la Virgen del Buen Fin de Córdoba salió el 15 de agosto

La historia de las hermandades y cofradías de Córdoba está llena de hechos anecdóticos y actos que en muchas ocasiones, aunque nacieron con la pretensión de perdurar en el tiempo, apenas duraron unos cuantos años. Este es el caso de la hermandad del Descendimiento, que el 15 de agosto del año 1988 procesionó de una manera especial a Nuestra Señora del Buen Fin . Una procesión que sin embargo no se llevaría a cabo durante muchos años.

Bendecida el 12 de octubre de 1985 por el entonces párroco de la iglesia de San José y Espíritu Santo, José Luque Requerey, la Virgen del Buen Fin pronto comenzó a tener protagonismo dentro de la cofradía . Al poco tiempo de que se incorporara la Dolorosa, los cofrades del Descendimiento decidieron realizar una modificación de sus estatutos.

En esta modificación se decidió añadir la celebración de unos cultos en honor a la imagen, que culminarían el día 15 de agosto con una procesión gloriosa por las calles aledañas a la feligresía. De esta forma, en la mañana de aquel 15 de agosto de 1988, Nuestra Señora del Buen Fin procesionó por primera vez de forma gloriosa y sin palio .

Sin embargo, tan sólo unos años después, los cofrades del Descendimiento comprobaron que esta procesión era inviable y decidieron dejar de realizarla , dada la poca participación y el poco público que se congregaba en las calles. Una procesión que aunque dejó de realizarse, muchos hermanos del Descendimiento aún recuerdan.