PASIÓN EN CÓRDOBA
Cuando la lluvia no era el único motivo para suspender una estación de penitencia en Córdoba
Obras, restauraciones y protestas hicieron que no salieran algunas cofradías
¿Se imagina que una cofradía no saliese en Semana Santa porque su templo está en obras o porque no tienen acabado un paso? En la actualidad que una hermandad suspenda su salida procesional en Córdoba sólo se entendería si existiese alguna previsión de lluvia. Sin embargo, no hace mucho tiempo, hasta principios de los 90, las cofradías han llegado a no salir a la calle por otros motivos distintos.
Por ejemplo, el Martes Santo del año 1974, la cofradía salesiana del Prendimiento suspendió su salida procesional porque su paso se encontraba en un proceso de restauración. Precisamente, tres años después, en el 1977, esta misma hermandad volvió a suspender su estación de penitencia porque su sede canónica, el santuario de María Auxiliadora, en el barrio de San Lorenzo, se encontraba en obras.
La semana Santa del 1976 también se vio a afectada por este motivo. La hermandad sacramental de la Merced salió a la calle este año sólo con el paso de palio, un hecho que duraría algunos años más. Por otro lado, la Virgen de las Angustias , obra del imaginero cordobés, Juan de Mesa, tampoco procesionó por encontrarse en restauración el conjunto escultórico.
Las obras de la parroquia de Santa Marina, en el año 1978 imposibilitaron la estación de penitencia de la hermandad del Resucitado que el Domingo de Resurrección de este año decidió no salir a la calle. Ese mismo año, la Reina de los Mártires, titular mariana de la cofradía de la Buena Muerte, tampoco procesionó por las calles de Córdoba.
La cofradía de la Madrugada cordobesa llevó a cabo esta decisión porque los costaleros contratados para sacar el palio de la Virgen -algo habitual en aquel entonces- pidieron más remuneración de lo pactado. La junta de gobierno de la hermandad no accedió a sus demandas por lo que la Reina de los Mártires no salió en procesión.
En otras ocasiones, incluso se han llegado a suspender salidas procesionales a modo de protesta. Este es el caso de la cofradía del Santo Sepulcro. Esta hermandad no salió a la calle en el año 1988 en protesta por la posible suspensión de carácter no laboral de la festividad de la inmaculada Concepción por parte del Gobierno Central.
A partir del año 1990 la Semana Santa cordobesa tomó una estructura más consolidada y ordenada. Desde este año desaparecen las cuadrillas contratadas y la mayoría de las cofradías ya empezaban a proyectar sus pasos. En estos años también hubo reformas en templos, sin embargo, en lugar de suspender las salidas procesionales, las cofradías buscaban otros lugares para salir.