La Cuaresma en ABC
El confinamiento de las cofradías de Córdoba cumple un año sin final en el horizonte
Desde el primer estado de alarma por el coronavirus las cofradías siguen sin poder salir a la calle
Hace ahora un año, el 13 de marzo de 2020, las cofradías dijeron adiós a la calle , pero no intuían que sería por mucho tiempo. Todavía quedaba la información oficial, la suspensión de las procesiones que decidieron entre el Obispado y el Ayuntamiento de Córdoba el sábado 14, pero en el tercer viernes de esa Cuaresma que de algún modo quedó a medias ya era evidente que las suspensiones habían terminado para unos meses.
No fue del todo brusco, porque varias cofradías, y la primera fue la Merced , ya habían ido suspendiendo los ensayos de costaleros que tenían previstos para estos días, y el Rescatado no había permitido que se besaran los pies del Señor por temor al contagio de una enfermedad de la que todavía no se sabía tanto.
Fue un corte bastante brusco para las cofradías que esa semana celebraban su quinario , y de hecho el Cristo de la Buena Muerte y el Señor de las Penas permanecieron durante varios meses en sus altares porque no era posible que sus hermanos se reunieran para desmontarlos y devolverlos a su lugar. La falta de información hacía pensar que sería cuestión de unos meses, que incluso algunas procesiones de gloria se podrían salvar, pero la realidad fue que las hermandades habían perdido la calle para un par de años.
Nadie lo sabía entonces, pero la sequía iba a ser particularmente larga para ciertas cofradías que iban a encadenar muchos años sin que sus imágenes salieran a la calle , en Semana Santa o en ocasiones extraordinarias. La fecha del 7 de marzo de 2020 no se tuvo como histórica en su día, pero ahora es una fecha señalada: fue la última vez, antes de la pandemia del Covid, que una imagen salió a las calles de forma libre, sin aforamientos.
El Cristo de la Clemencia recorrió los alrededores de San Jacinto en su Vía Crucis esa noche de sábado, conforme a sus reglas. Eso sí, no hubo besapiés al día siguiente para evitar el contagio. Poco antes habían estado en la calle el Señor de la Sentencia para el Vía Crucis de las cofradías (29 de febrero), el Cristo de la Buena Muerte (28 de febrero) y el Señor de las Penas (26 de febrero, Miércoles de Ceniza), estos últimos también para el rezo de las catorce estaciones. Ahí terminó todo, y continuó para las cofradías una sequía de presencias en la calle que no había empezado entonces, ni siquiera en 2019.
Precisamente la cofradía de los Dolores , es la que más tiempo lleva sin salir a la calle en Semana Santa. Su última estación de penitencia en las calles fue el Viernes Santo de 2017, el primero de la nueva carrera oficial de la Catedral. En los dos siguientes la lluvia obligó a la cofradía a suspender su estación de penitencia, pero la Virgen pudo ver la calle algo después y de forma extraordinaria. Fue el 30 de junio de 2019, junto a San Rafael y al S agrado Corazón de Jesús .
Más de la mitad de las cofradías hicieron con normalidad su estación de penitencia en 2019, la última Semana Santa con procesiones en las calles, pero a partir del Miércoles Santo apareció la amenaza de lluvia y provocó que muchas suspendieran o no pudieran completar. Con ello empezó un largo tiempo sin salir a la calle para muchas. Fue el caso de la Soledad , que no pisa las calles en público desde 2018, y de la Expiración , que tuvo al menos la procesión extraordinaria de la Virgen del Rosario en octubre de ese año.
En 2018 también salió por última vez sobre su paso el Cristo de Gracia . Fue en una multitudinaria procesión extraordinaria en septiembre, desde la Catedral hasta su sede de los Padres de Gracia, por el cuarto centenario de su llegada a Córdoba. Más atrás, igual que la Soledad, hay que remontarse para el Señor de la Caridad , que salió en procesión por última vez el Jueves Santo de 2018.
Al año siguiente la cofradía suspendió su estación de penitencia por la amenaza de la lluvia , aunque, según su costumbre en estos casos, las imágenes se asomaron al Compás de San Francisco . Lo mismo sucedió con María Santísima Nazarena : su última presencia en la calle data del Jueves Santo de 2018. La Buena Muerte suspendió en 2019, pero sus imágenes habían salido a la calle, aunque no en procesión, en los meses anteriores y posteriores.
Los traslados de la exposición de septiembre de 2019 fueron para muchas cofradías la despedida de la calle
El Cristo fue en Vía Crucis a la Catedral en la Cuaresma de 2019. Nuestra Señor a Reina de los Mártires acudió en noviembre de 2018 a San Pedro para celebrar allí su besamanos, ante las reliquias, siempre por el 75 aniversario de su cofradía .
Nadie lo sabía por entonces, pero los traslados de ida y vuelta para la gran exposición ‘Por tu cruz redimiste al mundo’ fueron en septiembre de 2019 la última ocasión para ver en la calle a muchas imágenes de cofradías de penitencia, entre ellas las que, por la suspensión de sus estaciones de penitencia, no habían podido salir en aquel año.
Fue el caso de Jesús de la Pasión, Humildad y Paciencia , Jesús Nazareno, la Sagrada Cena , las Angustias y el Descendimiento. A partir de ahí, el calendario de las proceisones de gloria siguió su curso habitual y terminó en noviembre de 2019. En 2020 ninguna de las hermandades pudo poner a sus imágenes en la calle, y en este año sólo las que lo hacen de forma más tardía albergan alguna esperanza.
Desde el 13 de marzo de 2020 las procesiones y actividades públicas no han tenido más que tres excepciones y sólo dos han tenido contacto con la luz del día. La procesión del Corpus Christi , en plena desescalada del confinamiento de primavera, se hizo por el interior de la Catedral, pero también salió al Patio de los Naranjos , limitado a un aforo muy concreto y cerrado al público en general a esa hora.
En octubre, la Virgen de la Paz y Esperanza salió a la plaza de Capuchinos para presidir su tradicional rosario matinal, que de forma tradicional se realiza por las calles. El recinto tenía los asientos contados y controlados los dos accesos , el de la calle Bailío y el que da a la plaza de las Doblas y Torres Cabrera, y se desarrolló con toda normalidad y por primera vez al aire libre, junto al imagen permanente del Cristo de los Faroles .
También Jesús Nazareno salió de su sede, pero lo hizo de manera privada, con destino a la Catedral, donde el pasado 20 de febrero presidió el Vía Crucis de la Agrupación de Cofradías , que se adaptó a las circunstancias. El público en las naves estaba limitado, las representaciones también se tenían que ceñir a un cierto comportamiento y todos los que participaban en el cortejo tenían que mantener la distancia, pero Jesús Nazareno pudo caminar por el interior , como las imágenes que habían presidido el rezo en los años anteriores.
Una más pudo haberse sumado: la parroquia de San Lorenzo intentó realizar una procesión con las reliquias de su titular , sin paso, por las calles del barrio, pero el Ayuntamiento de Córdoba no autorizó lo que se calificaba como «una manifestación de fe». Habría sustituido a la procesión con la imagen del santo que en los últimos años se realiza en su día, el 10 de agosto. Algún concierto, como el que ofreció la banda de la Esperanza para la Divina Pastora en la plaza de Capuchinos en septiembre, han mitigado la nostalgia de las cofradías por la calle en estos meses.
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