asistencia social
Las prestaciones por dependencia a mayores crecen un 32% en Córdoba sobre la etapa preCovid
Cifras
La provincia cierra 2022 con 21.778 personas de más de 65 años con ayuda reconocida, 5.357 más que en 2019
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La incidencia de la pandemia del coronavirus es cosa del pasado en materia de reconocimiento de prestaciones por dependencia a mayores de 65 años en la provincia. Córdoba ha acabado 2022 con un sobresaliente aumento de las ayudas concedidas a las personas de la tercera edad del 32,6 por ciento respecto a diciembre 2019, antes de que el Covid-19 empezase a hacer estragos, especialmente entre los mayores vulnerables.
En cifras brutas, hay 21.778 cordobeses de más de 65 años que, a fecha de diciembre de 2022, tienen ya la resolución de reconocimiento de la prestación por dependencia en sus distintos grados, según los datos de la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía a los que ha tenido acceso ABC Córdoba.
Supone un considerable crecimiento respecto al último mes en el acumulado de 2019, cuando sólo había 16.421 mayores en la provincia cordobesa con una respuesta afirmativa de la administración andaluza de la concesión de alguna ayuda como dependiente.
Por tanto, ahora mismo hay 5.357 cordobeses más con una prestación de dependencia reconocida que en 2019, antes de la pandemia, en este grupo etario, lo que supone ese 32,6 por ciento de crecimiento en sólo cuatro años, que coinciden con la llegada al gobierno andaluz de Partido Popular, liderado por el presidente de Andalucía, Juanma Moreno, en las dos últimas legislaturas.
La evolución de las solicitudes y de los reconocimientos de la dependencia, además, han sido bastante menores que el exponencial incremento en la gestión de la concesión de las prestaciones que venían atascadas de la época socialista, lo que evidencia un intento por salir del tapón.
En concreto, Córdoba acabó 2022 con un total de 34.684 mayores de 65 años solicitando una dependencia y su prestación correspondiente. Son apenas 777 peticiones más que antes de la pandemia, en 2019. Es decir, el crecimiento de las solicitudes ha sido de sólo un 2,2 por ciento.
Reducción de la brecha
Algo superior ha sido también la capacidad de la Junta de Andalucía para conceder el reconocimiento de la condición de dependiente a los cordobeses de la tercer edad. Tienen admitida esa situación de dependencia un total de 30.895 a cierre de 2022, cuando habían sido 29.580 para finalizar el 2019, el último año antes del dichoso coronavirus. En este caso, se cuentan 1.315 dependientes más que superan los 65 años. El crecimiento respecto a antes de la pandemia en términos relativos es del 4,4 por ciento.
La mejoría de la situación en el reconocimiento de prestaciones por dependencia a mayores en Córdoba, al ritmo que han permitido las circunstancias cruzando por medio una pandemia, no son un hecho aislado. De hecho, hay otro dato demoledor que demuestra la evolución positiva de la gestión en esta materia, a pesar de las dificultades y problemas que aún persisten. La brecha entre las personas que tienen reconocida una situación de dependencia pero no se les había reconocido ninguna prestación —lo que suponía estar en un limbo de ayudas sociales— se ha reducido drásticamente respecto a cifras preCovid.
En concreto y a diciembre de 2022, hay 4.042 personas menos que tienen reconocida la dependencia y también la prestación que en 2019. Es un avance que supone que uno de cada tres cordobeses dependientes sin prestación de antes de estallar el Covid ahora ya no están en esa situación. En cifras absolutas: si en 2019 había una diferencia de 13.159 cordobeses de más de 65 años que eran dependientes pero todavía no se le había reconocido ninguna ayuda, a cierre de 2022 esa brecha es de apenas 9.117 personas. Cuatro mil menos y un descenso que supera el 30 por ciento fuera de ese limbo prestacional.
El Covid-19 golpeó de forma especialmente contundente durante 2020 a las personas mayores y sobre todo a las más vulnerables dentro de ellas. Por eso, las cifras de 2020 sufrieron un considerable descenso en todas los aspectos analizables que quedan fuera de la lógica de la serie histórica.
Evolución interanual
Sin embargo, las cifras de dependientes mayores de 65 años en la provincia también aportan una evolución muy significativa en la comparación interanual, desde diciembre de 2021 y el último mes de 2022.
En este caso, las solicitudes de 2022 han crecido en 1.328 personas respecto a las que se presentaron en 2021, que se quedaron por encima de las treinta y tres mil, 33.356 en concreto, con una variación porcentual del 3,9 por ciento más en sólo un año.
Por su parte, el reconocimiento de personas de tercera edad dependientes en la provincia cordobesa subió en 832 personas de diciembre del 21 al mismo mes del 22. En este caso, la evolución relativa fue positiva en un 2,7%.
Por último, las personas con prestación reconocida de este grupo etario ha aumentado claramente en un 5,5 por ciento en el último año, es decir, en 1.149 personas (de 20.272 a 21.471) en Córdoba.