El Huesca, de nuevo punto de inflexión para el Córdoba

Hasta el 17 de junio de 2007, el Córdoba y el Huesca no se habían enfrentado en partido oficial. A día de hoy, 10 años después, son 16 los compromisos oficiales que han disputado. Y algunos de ellos con carácter trascendental para ambos. Especialmente, los dos primeros en los que había un ascenso a Segunda .

Y, en aquella ocasión, la sonrisa le correspondió al Córdoba . Ganó en la ida por 2-0 y empató en la vuelta a 1. De esta forma, regresaba a la división de plata, al fútbol profesional. Precisamente, hoy, ambos conjuntos vuelven a disputar un partido que tiene de fondo la Segunda B . Porque, pese a que quedan aún muchas fechas en el calendario, lo cierto es que Córdoba y Huesca han entrado en una dinámica peligrosa de resultados que les ha acercado mucho a los puestos de descenso. Por ello, nuevamente este partido se corresponde con un punto de inflexión en la historia reciente de la entidad blanquiverde.

Sin ir más lejos, así lo recuerda Luis Miguel Carrión . El entrenador actual de la primera plantilla del Córdoba formaba parte de la plantilla que en 2007 afrontó esa serie eliminatoria ante el Huesca. Por lesión, no pudo actuar en esos partidos, pero argumentaba que «fue una alegría muy grande ascender aquí, porque como se vive aquí no se vive en ningún lado». Entrando más en lo puramente deportivo, indicó que «hicimos dos buenos partidos y vino a la vuelta mucha gente de Córdoba, incluso más de 175 allí». De ahí, que el entrenador barcelonés incidiera en su idea de que «espero que se vuelvan a vivir cosas así en la ciudad, porque entramos en crecimiento desde aquella fecha más allá de que hubiera ascensos y descensos».

También tiene el recuerdo de lo vivido en aquella fecha Rafael Campanero . El presidente de honor del Córdoba, que por entonces estaba como dignatario del club. Del partido disputado ante el Huesca, reseñaba que «me acuerdo de los dos goles del partido de ida, en el que llegábamos con la inercia de lo vivido en Pontevedra una semana antes» . Especialmente, hablaba del 2-0, obra de Guzmán porque «es de los goles más bonitos que se han visto en El Arcángel, en España y en el mundo». Y es que «no he visto en mi vida muchas definiciones como ésa». Aun así, repartió cariño Campanero al asegurar que «ayudó el de Pierini al principio para llevar mucho mejor la eliminatoria».

Experimentado en todas estas lides, Campanero apuntó que «era importantísimo abandonar la Segunda B para el club y lo hicimos» , al igual que reconoce que es «fundamental» lo que ocurra en el compromiso de mañana para el devenir de la competición. Con todo, confesó en su regreso mental a junio de 2017 que «no quise saber nada del partido de vuelta: Me encerré hasta que me dijeron que habíamos subido». Por ello, insiste en la idea de que «fue un día de mucha alegría y sentimiento».

Precisamente, los protagonistas de aquella cita se han dejado ver a lo largo de esta semana, en la que se ha recordado ese partido y la simbología que tuvo para el cordobesismo. Alessandro Pierini , por ejemplo, pasó por los micrófonos de Onda Cero. Desde Italia, confesaba que «es uno de los partidos que más recuerdo en mi corazón». Y es que el entonces capitán del Córdoba incidía en la idea de que todo lo que rodeaba al partido era especial: «Por cómo llegamos, por lo que nos jugábamos, por la afición, que puso a reventar el estadio» . Incluso, el italiano confesó que en el plano íntimo «también por lo que supuso ese gol». Por su parte, Guzmán Casaseca, hoy jugador de la primera plantilla del Real Valladolid, no dudó en retuitear un vídeo que a través de la cuenta «Canal Blanquiverde» rememoraba los goles de aquel encuentro.