Coronavirus Córdoba
Córdoba CF | Una temporada con una sucesión de sinsabores iniciada por Jesús León
La acumulación de problemas extradeportivos tuvo su reflejo sobre el terreno de juego
«No era nuestro año» , decía ayer una voz autorizada del cordobesismo para definir la temporada del Córdoba , que empezaba el curso como respetado aspirante al ascenso y lo ha acabado sin la posibilidad de disputar el play off de ascenso al figurar como quinto en la temporada regular cuando la Federación Española clausuró la competición antes de tiempo a causa de la pandemia del coronavirus.
La crisis del Córdoba comenzó mucho antes. A finales de julio, Jesús León , entonces presidente del Córdoba y poseedor del paquete mayoritario de acciones, no cumplió con el último plazo de la compraventa a Carlos González de las acciones de la sociedad y generó una sensación de inestabilidad en torno al club que afectó a la plantificación deportiva.
Alfonso Serrano , elegido para hacer la plantilla, vio cómo los volantazos de León afectaban en sus incursiones de mercado y el Córdoba, cuando arrancó la temporada, tenía más nombre y menos potencial del esperado. A eso se sumó la falta de capacidad económica y comenzaron los primeros atrasos en los pagos .
Por si no fuera bastante, en el verde el Córdoba sufría para sacar adelante los partidos de casa y se mostraba frágil cuando salía de la misma hasta el punto de dar una sensación de zarandeo constante. Y eso hizo que, sin despegarse, viera a distancia a la zona noble del campeonato. El proyecto hacía aguas y tuvo como exponente la salida de Enrique Martín por tantos factores deportivos como económicos.
Serrano echó mano de su apuesta inicial: Raúl Agné . Con el maño el equipo se estabilizó, al tiempo que los impagos dejaron al club en una situación crítica . Aunque entre una situación y otra se produjo la detención de Jesús León , a quien se imputaron hasta cuatro delitos, y se nombró una administración judicial encargada a Francisco Estepa y Francisco Javier Bernabéu . Ese nuevo escenario dio pie a una administración concursal y la venta de la unidad productiva del club a través de una subasta adjudicada al grupo bareiní Infinity .
La nueva trajo dinero, muy necesario para e vitar la desaparición del club, y generó expectativas distintas . Incluso, el equipo ganaba dos partidos fuera de casa, su gran lunar deportivo hasta el momento, que le pusieron a tiro de play off antes de acabar la primera vuelta. Pero falló en varias ocasiones .
A eso se unió un mercado de invierno incesante entre entradas y salidas de jugadores. Se buscó veteranía en los fichajes, al tiempo de que Infinity daba forma a su proyecto. El equipo, sin grandes resultados, seguía cerca. Y u na serie de tres victorias en febrero le metió en zona de play off. Incluso soñó con acabar primero , pero un punto sobre nueve lo sacó de la cuarta plaza .
En paralelo, la recusación del juez que autorizó la venta de la unidad productiva dejó en fase de espera la consolidación del proyecto de Infinity, ya que el auto debe ser autorizado por el nuevo titular con el fin de que la Federación valide su inscripción la próxima campaña . Y, paradójicamente, el Córdoba CF SAD, intervenido judicialmente, vuelve a contar con Carlos González como presidente , quien sigue en litigios con León por impago de las acciones de julio.
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