BALANCE
Córdoba CF | Tres problemas y cuatro técnicos
Los relevos en el banquillo no han acabado con los grandes contratiempos del equipo
El Córdoba CF necesita hacer lo que nadie ha hecho en la historia de Segunda para lograr la permanencia en la categoría, ya que ningún equipo se salvó después de llegar con 19 puntos a la jornada 27. El equipo ha tenido cuatro entrenadores, de momento, esta temporada, pero sus problemas han sido básicamente los mismos con todos los técnicos que han pasado por el banquillo. Cada uno ha aportado detalles diferentes a la plantilla, pero los contratiempos principales han sido idénticos: alarmante fragilidad defensiva , preocupante debilidad mental ante cualquier golpe adverso y unos horribles finales de partido que le han hecho perder muchísimos puntos a última hora.
Luis Carrión (10 jornadas), Juan Merino (7 partidos), Jorge Romero (9 encuentros) y José Ramón Sandoval (que solo ha dirigido un duelo) han sido los cuatro técnicos por los que ha apostado el Córdoba a lo largo de esta temporada para salir de una situación que parece que tiene difícil solución. El equipo está a 13 puntos de la zona de permanencia, a pesar de los cambios en el banquillo porque sus problemas se han reproducido con todos los entrenadores.
Sin duda, el principal contratiempo que ha tenido el Córdoba esta temporada ha sido el paupérrimo nivel defensivo.Una cuestión que ha martirizado a los defensas del conjunto blanquiverde, pero que han provocado todas las líneas del equipo. De hecho, la prueba de que no ha sido solo un problema de elección de los zagueros es que el equipo lleva tres semanas jugando con Aythami y Valentín tras la salida de Joao Afonso, pero el rendimiento atrás sigue siendo deficitario a pesar de haber aumentado el nivel en esa zona.
El Córdoba CF ha recibido la friolera de 51 goles en solo 27 partidos, lo que supone una lamentable media de casi dos goles por encuentro en contra. La fragilidad defensiva ha sido el coco de los problemas cordobesistas. Un dato curioso: el Córdoba solo ha ganado los cinco partidos que dejó la portería a cero.
Evidentemente, no ha sido el único. El Córdoba CF ha demostrado una debilidad mental dramática para un grupo profesional. Desde el primer gol que encajó ante el Cádiz en la jornada inaugural hasta la remontada que formalizó Kunde para el Granada en el último partido en El Arcángel. La plantilla blanquiverde ha demostrado una incapacidad absoluta para levantarse ante cualquier golpe, por pequeño que fuese del rival. Cualquier excusa le ha servido: goles en contra, dianas encajadas muy rápido, penaltis fallados a favor, tantos en propia puerta, alguna decisión arbitral controvertida, miedo a conservar alguna ventaja... En conclusión:el Córdoba no ha sido capaz en toda la temporada de conseguir una remontada.
Otro de los grandes males de este Córdoba CF han sido sus tétricos finales de partido. El conjunto blanquiverde, ya sea con Carrión, con Merino, con Romero o con Sandoval, ha perdido una infinidad de puntos en los últimos diez minutos de los encuentros. En concreto, ha cedido la friolera de 11 puntos desde el minuto 81. Eso supone que la plantilla cordobesista podría estar fuera de los puestos de descenso a Segunda B si los partidos se acabasen en el 80. Una demostración más de que los finales de los encuentros han sido una losa tremenda para un plantel que ha hecho de la fragilidad un modo de vida esta temporada.
El dato de los goles encajados y marcados en los últimos 15 minutos son bastante significativos también sobre el mal endémico del Córdoba CF al final de los partidos. El equipo solo ha sido capaz de anotar seis goles en esta franja de tiempo. Sin embargo, ha recibido 16 goles en contra. De hecho, este tramo es, con diferencia, en el que más goles ha recibido esta temporada. Las demás, prácticamente, ni se acercan a ella.
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