Abel Gómez, el coleccionista de ascensos que también brilló con Córdoba CF y Cádiz CF

Nadie mejor que Abel Gómez (Sevilla, 1982) para explicar un trascendental Cádiz CF-Córdoba CF (sábado, 21.00 horas, LaLiga 123 TV) en el Ramón de Carranza. Ascendió como blanquiverde a Primera División en la temporada 2013-14. También ascendió como cadista a Segunda División en la campaña 2015-16. En realidad, el pivote sevillano es un auténtico coleccionista de ascensos en el fútbol español.

Tiene cinco en su palmarés . Cuatro a la máxima categoría con cuatro equipos distintos: Murcia (2006-07), Xerez (2008-09), Granada (2010-11) y Córdoba CF (2013-14). Más otro a la división de plata que conquistó con el Cádiz CF la pasada campaña. Para el medio, la clave de todos estos éxitos ha sido «el trabajo, la dedicación y la ilusión, a pesar de que te tachen ya de ser veterano con 35 años, de afrontar siempre retos diferentes».

Abel Gómez lució el brazalete de capitán del Córdoba CF . Estuvo tres temporadas en El Arcángel. Superó el centenar de partidos oficiales como cordobesista. En total, fueron 104. También conoce el vestuario del Cádiz CF , donde ha pasado el último año y medio. En enero tuvo que marcharse por falta minutos. Fichó por La Hoya Lorca. Ahora busca su sexto ascenso allí. Tiene la primera oportunidad directa con el enfrentamiento de campeones ante el Albacete del cordobés Rafa Gálvez.

El centrocampista hispalense tiene claro que todo sigue siendo igual por Segunda. «Tengo claro que el partido del sábado se decidirá por pequeños detalles », apunta con el regusto de un pasado reciente en la Tacita de Plata. De hecho, sabe que el Córdoba CF tendrá difícil puntuar en el Carranza por el estilo de juego cadista. «El Cádiz está a la expectativa de robar y salir a la contra con jugadores muy rápidos ».

Nadie en el mundo del fútbol le encuentra una explicación lógica a la situación del Córdoba CF , un equipo que salía con la expectativa de conseguir el ascenso y que está con el agua al cuello. Abel Gómez tampoco entiende qué le pasa al conjunto blanquiverde. A su juicio, la única explicación posible es que «cuando se cogen dinámicas negativas siempre se crea esa pizca de ansiedad y esa necesidad de ganar, a veces te lleva a tropezar». Eso sí, «el equipo tiene espíritu» y hay gente «comprometida» en el vestuario, por eso cree que «seguro que lo van a sacar adelante» y conseguirá la permanencia en Segunda División.