Los problemas en defensa exigirán ideas a Djukic
El eje de la zaga queda bajo mínimos por las lesiones de Íñigo y Bouzón
Deberá exprimirse el cerebro Miroslav Djukic y, si nada lo remedia, tendrá también que exprimir al máximo sus limitados recursos defensivos durante los próximos días. El Córdoba recibirá al Granada el día 5 de enero, pero el entrenador blanquiverde sólo pudo contar en la sesión de ayer con uno de sus centrales puros. El serbio Aleksandar Pantic fue el único que se ejercitó al nivel del resto de compañeros. También lo hizo Deivid, aunque parece claro que Djukic prefiere al ex de Las Palmas en la posición de pivote y no en el eje de la zaga.
Iago Bouzón, que cayó lesionado en el partido frente al Villarreal, continúa fuera de la dinámica de grupo. El 1 de diciembre sufrió un golpe en el oblículo del abdomen, pero la fecha de su vuelta a los terrenos de juego sigue siendo una incógnita. Ayer tampoco se puso a las órdenes de Djukic en la Ciudad Deportiva, sino que se quedó en El Arcángel para avanzar en su recuperación.
Pero el contratiempo que realmente podría romper los planes del técnico es el que afecta a Íñigo López. El central riojano había disputado todos los minutos ligueros hasta que tuvo que ser sustituido en el Camp Nou. Una rotura de fibras le impidió completar el partido frente al Barcelona y, de momento, le mantiene alejado del césped. Como Bouzón, Borja García, Ryder Matos y Carlos Caballero; se ejercitó en las instalaciones del estadio.
Pero las dificultades para disponer una pareja de centrales no terminan ahí para Djukic. Si finalmente pudiese contar con Íñigo López la semana que viene, frente al Granada, la opción más lógica situaría al ex del Celta junto a Pantic en el eje. Los dos han sido los preferidos el entrenador, como también lo fueron para Albert Ferrer. Juntos, acumulan casi 2.700 minutos de juego entre Liga y Copa del Rey. Sin embargo, ambos han visto cuatro cartulinas amarillas, por lo que se encuentran a sólo una de la suspensión.
Mientras Iago Bouzón siga sin estar disponible, la amonestación de cualquiera de los dos centrales apercibidos complicaría sobremanera el escenario. De hecho, el efecto dominó sería inevitable. Djukic debería utilizar a jugadores como Deivid para cubrir el agujero en el centro de la defensa. Así quedaría vacante el puesto de pivote defensivo, que había encontrado por fin en las últimas semanas a su primer inquilino estable desde que comenzase la temporada en la figura del «15» canario.
Patrick Ekeng o Aritz López Garai, en ese orden, serían los futbolistas mejor colocados para acompañar a Luso Delgado en sustitución de Deivid si este último tuviese que retrasar su posición. Pero el camerunés se perderá un mínimo de cuatro partidos con el Córdoba al haber sido convocado por su selección nacional para disputar la Copa de África.
Las opciones de Djukic son tan limitadas que incluso podría verse el técnico obligado a modificar su sistema o dar entrada en el mismo a jugadores como López Garai, que hace pocos días se encontraba en la rampa de salida del club, o Fausto Rossi, de características sensiblemente diferentes. Más sorprendente incluso sería la entrada en el once de otro descartado, Carlos Caballero.
