Ferrovial aumenta la frecuencia de limpieza y recogida de basura

El Ayuntamiento de Cabra firmó ayer el nuevo contrato para la gestión del servicio de recogida de basuras y limpieza viaria con Ferrovial Servicios, la mejor oferta del procedimiento de licitación, por volumen total de 12,1 millones de euros y con un plazo de diez años —a razón de 1,2 millones anuales—. Ha pasado casi un año desde que se conociera el resultado del concurso después del recurso presentado por otra de las empresas ofertantes. Una situación que hubo de ser solventada por la Asesoría Jurídica Muniicpal, obligando así a conceder una prórroga del actual contrato con a Urbaser ante el bloqueo del nuevo proceso.

El alcalde de Cabra, el popular Fernando Priego, aseguró ayer en el acto protocolario de firma que «es un momento importante» para la ciudad ya que se ha conseguido un «coste razonable para que no paguemos más y ganemos con el servicio». Al acto de la rúbrica acudió el director regional de Ferrovial Servicios, Juan Antonio Valladares, además de los técnicos encargados del pliego municipal.

Entre las novedades que presenta el nuevo contrato destaca el incremento de la frecuencia de barrido con mayor dotación mecánica y humana, contando de nuevo con el «servicio de brigada» por las tardes y con limpieza especial de imbornales y alcantarillas, manchas en el acerado, sistema de gestión específica de papeleras, malas hierbas en alcorques, baldeo mecánico de zonas peatonales (tres días a la semana) y calzadas; o recogida de naranjas y hojas caídas en temporada otoñal, entre otras cuestiones.

En cuanto a gestión de residuos sólidos urbanos el acuerdo obliga a establecer un sistema de recogida especial de basura en la plaza de abastos y el incremento de la frecuencia en la recogida de envases, en concreto de tres a la semana, quedando en manos de Ferrovial la gestión del futuro Punto Limpio que la Junta de Andalucía ha comprometido instalar en la localidad a primeros del próximo año.

La nueva empresa se subroga a la totalidad de la plantilla que actualmente estaba operando con la concesionaria saliente, Urbaser, quedando garantizados «al cien por cien» sus derechos laborales.