La denuncia por agresión al árbitro no pasa de «faltas»

El caso de la denuncia del árbitro de 15 años Guillermo Ávila contra Francisco José Montes, presidente del Calahorra, quedó visto para sentencia después de que ayer se procediera a un «juicio rápido» celebrado en la sala número 3 de la Audiencia Provincial de Córdoba y presidido por la jueza Relaño. Por cierto, que el caso tuvo una gran repercusión mediática, algo que «no ha gustado», según la representación de la parte demandante.

El auto de los hechos se corresponde a una denuncia por «agresión» efectuada por el colegiado tras el encuentro disputado el pasado domingo 14 de diciembre en el campo municipal de Fátima en el partido disputado entre el Salvador Allende y el Calahorra, correspondiente a la Liga de Cuarta División alevín. Así se recogía en el acta del partido, donde se registraban también insultos y amenazas.

Según se ha desvelado tras la vista en la que los testigos ofrecieron múltiples versiones, la jueza Relaño no ha admitido el intento de la acusación particular más la de la Federación Andaluza de fútbol, que también se ha dado cita de manera particular con el fin de abanderar una mejor regulación del juego limpio, de que el caso se retomara por la vía penal al considerarlo como «delito». Además, insistió en que «no se ha tenido en cuenta por parte del forense el informe presentado por la Clínica del Deporte», en el que se hacía ver que la lesión era de mayor duración y que el reconocimiento sólo fue «verbal». De hecho, se argumentaba que el árbitro sigue aún de baja. Guillermo, el denunciante, comentó que «se sentía muy agobiado», aunque expuso que seguí teniendo secuelas.

La acusación reiteró que la familia del árbitro renunció a la indemnización económica de acuerdo con la multa que podría caerle en la sentencia a Francisco Montes. Aunque sí ha pedido el castigo mayor que se corresponde a dos meses a razón de 12 euros por día. En total, 720 euros, mientras que el Fiscal del caso ha solicitado un mes, por lo que la multa quedaría reducida a la mitad: 360 euros.

En un principio, se espera que el veredicto sea dentro de dos semanas. Por otro lado, Francisco Cerezo, delegado del Calahorra, señalado también en el acta arbitral, salió sin cargos. A la salida de la Audiencia Provincial, afirmó que «ha quedado claro que el árbitro ha mentido y ahora vamos a actuar demandando por injurias; se nos condenó antes de que nos juzgaran». Asimismo, padres de jugadores del Calahorra denunciaron que «nuestros hijos han pasado por asuntos muy desagradables en el colegio por el daño que se le ha hecho al club». Un optimismo que también reflejaba Montes, quien habló de que «todo ha ido bien».