Que cada palo aguante su vela
Soy un afectado por las inundaciones que de forma recurrente se vienen produciendo en Tocina y Los Rosales desde hace más de once años, y que dañan nuestras viviendas. El problema y sus causas son sobradamente conocidos por las instituciones, al igual que se sabe que para solucionarlo hay que construir un nuevo colector general, que cuesta casi dos millones de euros. Pues bien, durante todo este tiempo, mientras los vecinos vivimos angustiados cada vez que llegan las lluvias, mientras pagamos religiosamente nuestros recibos y tributos, y mientras protegemos como podemos nuestras casas, los políticos se han dedicado a escurrir el bulto y a tirarse los trastos unos a otros, sin que hasta la fecha se haya solucionado de forma definitiva el problema.