Los dueños de conservas «Lola» y «Reina del Guadiana» cumplen 125 años
Concepción quiere llevar sus latas de atún y melva al mercado exterior
Detrás de las conservas artesanas de caballa y melva con las marcas «Lola» y «Reina del Guadiana» laten ya 125 años de historia y cinco generaciones de esfuerzos de una misma familia. «Mi tatarabuela adquirió una charanga de pescado en Ayamonte para intermediar en el negocio del pescado; mi bisabuelo viajó a Galicia donde estuvo vinculado a la industria del mar; mi abuelo regresó a Huelva y creó la actual empresa de conservas con una factoría que tanto mis tíos como mi padre han ampliado y modernizado». Tal es el relato de Juan Concepción, actual gerente de Conservas Concepción, una compañía que factura cinco millones de euros y emplea de forma directa a más de 100 personas (la mayoría mujeres).
El grupo está presente en todo el mercado nacional y ahora su gran objetivo es crecer en el exterior. «El 15% de nuestras ventas proceden tradicionalmente de Italia, donde la caballa artesana está muy cotizada, y estamos iniciando acciones comerciales en países como Reino Unido», indica el directivo. A lo largo de estas décadas la familia Concepción ha liderado distintos negocios. «Adquirimos otras firmas conserveras ayamontinas como Pérez y Feu Tejero y en épocas pasadas controlamos actividades vinculadas a nuestro negocio, como una flota de barcos y una salina».
Hoy en día la fábrica es más eficiente que la de hace un siglo, pero «no ha cambiado la esencia ni la forma de hacer las conservas, para lo que es importante la limpieza de la caballa a mano, sin utilizar ningún tipo de aditivo químico, y envasarla con aceite de oliva o de girasol». El grupo —que también tiene enseñas como «Rita» o «Los Miguelitos»— comercializa productos de caballa, melva, bonito, atún, sardinillas o mejillones en cadenas como Makro, Covirán, Miquel Alimentación, Lecqlerc y otras tiendas tradicionales. «Este año creceremos un 7% y tenemos buenas expectativas por nuestra apuesta en el exterior y por la recuperación económica, que hará que el consumidor vuelva a valorar los productos de calidad más allá de las diferencias en el precio».
En este momento Conservas Concepción —controlada por una veintena de accionistas familiares— posee el 50% de la piscifactoría de lubina Maresa y también tiene una rama inmobiliaria, con una carteras de apartamentos en régimen de alquiler en Ayamonte, a lo que se suman inmuebles para turistas en la costa onubense.