Repsol emitirá deuda por 5.000 millones y venderá activos por 800
La junta de Talisman decidirá en febrero si acepta la oferta de la petrolera española
Repsol deberá esperar 60 días para conocer si los accionistas de la petrolera canadiense Talisman aceptan la oferta del grupo español valorada en unos 10.450 millones de euros. «Ese es el punto crítico de la operación», subrayó ayer el presidente de Repsol, Antonio Brufau, quien destacó que el consejo de Talisman ha aprobado por unanimidad la oferta.
No obstante, el acuerdo firmado por ambos consejos de administración prevé que si más de un 10% de los accionistas de la compañía canadiense rechaza la oferta, Repsol tiene la potestad para decidir si mantiene la oferta o no. «Estoy seguro de que saldrá adelante sin contratiempos», dijo Brufau en una rueda de prensa, quien añadió, ante la posibilidad de que se produzcan otras ofertas por Talisman, que «no contemplo una guerra de precios». Si no hay ningún problema, la operación estará cerrada a mediados de 2015.
En concreto, Repsol ofrece 8 dólares por cada acción de Talisman, lo que supone un desembolso de 6.750 millones, y además asumirá su deuda de 3.700 millones (a 30 de septiembre).
Emisión de bonos
Para financiar esta operación, Repsol dispone de 6.400 millones de euros en efectivo y 2.600 millones en líneas de crédito a largo plazo. Y para asegurar su calificación crediticia, realizará una emisión de bonos híbridos de hasta 5.000 millones de euros. Al final de la operación, la deuda neta proforma de Repsol habrá pasado de los 2.030 millones de euros actuales a 12.500 millones. Asimismo, espera conseguir unas sinergias mínimas de 165 millones de euros al año y realizará en los próximos doce meses desinversiones de activos por más de 800 millones de euros.
Brufau reconoció que las negociaciones que mantenían con Talisman desde hace meses se han acelerado en las últimas semanas como consecuencia del desplome del precio del petróleo y del castigo bursátil que estaba sufriendo la compañía canadiense por su «gran debilidad financiera debido a su elevada deuda».
El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, negó en la misma rueda de prensa que la operación fuese cara y declaró que «ha sido un buen acuerdo en el momento adecuado».
Afirmó que la compra de Talisman casi duplica el tamaño de Repsol, reforzando su estratégica actividad de exploración y producción de hidrocarburos «con activos de primera calidad» en Norteamérica, sudeste asiático, norte de Europa e Hispanoamérica. Asimismo, «profundiza el conocimiento de la operación de recursos no convencionales, crudos pesados y activos en aguas profundas», todo ello «manteniendo nuestro compromiso de ofrecer un dividendo competitivo».
Proyectos rentables
Por otra parte, y sobre el desplome de la cotización del petróleo, Brufau subrayó que «todos los pozos y todos los proyectos de Repsol son rentables» con los actuales precios del crudo.
Respecto al nuevo impuesto establecido por el Gobierno a la exploración de hidrocarburos, dijo que «nos preocupa porque puede tener su impacto en la rentabilidad de algún proyecto». Y sobre los carburantes, afirmó con rotundidad que las petroleras no jugamos con los precios».