Las aerolíneas duplican beneficios por el crudo y solo bajan los precios un 5%
La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) mejora sus previsiones y estima que el sector ganará un 25,6% más en 2015
Entre las innumerables consecuencias de la pronunciada caída del importe del petróleo –que ayer cerró una nueva jornada de descensos, al retroce hasta los 64,24 dólares por el barril de crudo Brent– se sitúa la reducción de costes en las compañías aéreas, en las que los combustibles representan siempre uno de los principales factores, capaz por sí solo de inclinar la balanza de la cuenta de resultados hacia pérdidas o ganancias.
La patronal de las compañías aéreas, la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés), anunció ayer que ha revisado sus previsiones para este año y el próximo, vista la evolución de los precios del petróleo durante las últimas semanas y el crecimiento del PIB mundial.
En concreto, las compañías aéreas cerrarán el año con unos beneficios de 19.900 millones de dólares (16.006 millones de euros), un 10% más que las estimaciones realizadas durante el pasado mes de junio y casi el doble que la cifra registrada en 2013 (10.600 millones de dólares). Pero se espera que la influencia de la bajada del importe del crudo seguirá siendo perceptible el próximo año, cuando las ganancias se dispararán un 25,6% hasta los 25.000 millones de dólares (20.099 millones de euros).
Si finalmente se cumplen estas estimaciones, la factura total del combustible para las compañías aéreas ascenderá hasta los 192.000 millones de dólares (154.290 millones de euros), que pese al retroceso seguirá representando más de una cuarta parte de los costes totales (26%) del sector.
La pregunta del millón es si esta caída del crudo se reflejará en el precio de las reservas aéreas o si, como está sucediendo con la venta de gasolina a clientes minoristas, las bajadas no se trasladarán de manera inmediata al público.
La IATA considera que, en líneas generales, ya se está produciendo esta rebaja en los billetes, aunque en una proporción bastante inferior a la reducción de los costes energéticos. Señala que las tarifas aéreas (media de lo que abonan los pasajeros, excluyendo impuestos y recargos) van a reducirse un 5,1% durante este año para los vuelos comerciales y un 5,8% para los de carga de mercancías. El margen final supondrá un beneficio neto por viajero de 6,02 dólares (4,84 euros) en 2014 y 7,08 dólares (5,69 euros) durante el año que viene.
Contratos de cobertura
El caso de cada aerolínea no es extrapolable al resto. Las compañías suelen firmar por separado sus contratos de abastecimiento de combustibles con seguros de cobertura que les garantizan un precio fijo durante un determinado periodo. Así, por ejemplo, IAG (el «holding» que integra Iberia, Vueling y British Airways) dispone de unas coberturas del 91% para el cuarto trimestre del año, del 85% para el primer trimestre de 2015, del 72% para el segundo trimestre y del 51% para el tercero, según fuentes de dicha compañía. Por tanto, cuanto mayor sea el porcentaje de combustible asegurado, menor será el impacto de la bajada de los combustibles en la cuenta de resultados. En este sentido, Willie Walsh, el consejero delegado de IAG, descartó el pasado mes de octubre una rebaja de sus tarifas a corto plazo, pero desde la compañía recuerdan que este sistema les garantizó contener el encarecimiento de los billetes en los momentos de mayor crecimiento del importe del crudo .
Diferente es el caso de Air Europa, más reacia a suscribir este tipo de seguros. Actualmente, según fuentes del grupo, tiene cubiertas algo más de la mitad de sus necesidades de combustibles, un porcentaje pequeño que aunque expone más a la compañía a las subidas del petróleo le permite, en cambio, beneficiarse en mayor medida de los descensos. «Estas caídas de precios ya se están repercutiendo en los billetes, en la misma medida en que está bajando el petróleo», subraya un portavoz oficial. La aerolínea no especifica, sin embargo, en qué proporción han efectuado estos recortes de precios. Por su parte, Ryanair, señala que la negociación de las nuevas coberturas les ha permitido «generar unos ahorros de un 7% por pasajero».
La IATA considera que el importe del barril de crudo se mantendrá durante los próximos 12 meses en un entorno algo más elevado que el rango de precios actual, pero por debajo de los 100 dólares (80,41 euros), algo que nunca había ocurrido. La media, según los cálculos de la IATA, se podría situar cerca de los 85 dólares (68,3 euros).