Un día cofrade señalado
Honores a la patrona de España
El 8 de diciembre de 1854 la Iglesia proclamó el dogma de la Inmaculada Concepción –la Virgen María no fue alcanzada por el pecado original–, fecha que se sigue recordando en lugares señalados de todo el mundo. En Córdoba, una ciudad clave para la difusión del dogma católico, el día de ayer fue señalado tanto para el Obispado y para la comunidad cristiana organizada en las cofradías, que celebraron multitud de actividades en torno a la figura de la Madre de Jesucristo. El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ofició una eucaristía en la Mezquita-Catedral donde cinco sacerdotes se ordenaron para iniciar su vida pastoral. Previamente, el prelado participó en la vigilia celebrada en el primer templo de la diócesis. Las hermandades, por su parte, tuvieron ayer una de esas jornadas de acumulación de actividades por toda la capital cordobesa. Solamente besamanos, se produjeron once. La hermandad del Sepulcro llevó a cabo un triduo y los hermanos de la Esperanza rezaron el Rosario de la Aurora. Córdoba ocupa un lugar central en el dogma puesto que en 1614, el dominicio Cristóbal de Torres pronunció un sermón en la Mezquita-Catedral en contra de esta condición mariana. Esa fue la chispa que hizo que franciscanos y dominicos se enfrentaran por un debate de fe que no llegó a convertirse en dogma para la cristiandad hasta el año 1854.