Ejemplaridad entre aficiones
Los seguidores del Elche y del Atlético escenifican la unión contra la lacra de la violencia en el deporte
Los hechos acaecidos la pasada semana junto al Manzanares y una vida perdida activaron durante la semana los resortes necesarios para actuar con inmediatez. El objetivo es recuperar la calma, expulsar a los violentos y erradicar lo no ligado al deporte, y trabajar unidos. Así, en fraternidad, se entremezclaron ayer ilicitanos y madrileños. El Elche recibió en su estadio al Atlético, que movió ficha en los últimos días expulsando al Frente Atlético. Sobre el césped del Martínez Valero se proyectó el lema «afición + respeto: vive el fútbol». Los futbolistas, además, lucieron camisetas con una proclama contra la violencia en el fútbol, en el deporte.
El partido, sin embargo, no solo tenía su importancia y su interés en el verde, sino también en la grada, entre los seguidores, incluso en los prolegómenos del encuentro entre los equipos ilicitano y madrileño. Era el partido conjunto y cordial de la afición. Lo que hubo en este sentido fue ejemplaridad entre los seguidores del Elche y del Atlético, que condenaron unidos, hermanados, en los instantes previos a que arrancase el juego, la violencia.
En la explanada del aparcamiento del Martínez Valero hubo intercambio de bufandas, de banderolas, fotos entre peñas y actos cívicos. Participaron representantes de las peñas ilicitanas y peñistas del Atlético, en su mayoría de la provincia de Alicante. Convivieron ambas aficiones y esperaron juntas las llegadas de los autobuses de sus respectivos equipos al estadio. Comunión y hospitalidad. Luego, los atléticos –unos mil seguidores– se ubicaron en uno de los anillos del segundo graderío, el lugar habitual en el que se da acomodo a los aficionados visitantes.
El amplio dispositivo de seguridad que actuó ayer en este partido no contabilizó incidente alguno. Lo que debería ser obvio, de sentido común, por el momento se tiene como una situación que precisa de los esfuerzos de todos.
El Elche comunicó a través de su web en tiempo y forma que, en base a su legítimo uso del derecho de admisión, impediría el acceso al estadio a todo aquel aficionado que luciera alguna prenda con distintivos del Frente Atlético –medida que también se extiende a los seguidores de la peña Riazor Blues, vinculada al Deportivo–. El club alicantino, además, advirtió que no tolerará ningún tipo de violencia, incluida la verbal, que pueda producirse entre aficiones o contra árbitros y equipos rivales.