El Cabildo quiere abrir la celosía en dos hojas como puerta de la Catedral
La Iglesia envía a la Junta la nueva oferta para la fachada norte del templo, que permitirá el acceso que piden las cofradías para Semana Santa
Al menos en la intención del Cabildo, la segunda puerta de la Catedral, que permitirá un nuevo acceso para las cofradías en Semana Santa, ya tiene forma. El organismo eclesiástico acaba de presentar en la Delegación Territorial de la Cultura de la Junta de Andalucía el proyecto para que se pueda abrir una de las cuatro celosías que instaló el arquitecto Rafael de La-Hoz Arderius en 1971. Esta modificación hará posible que los cortejos procesionales puedan salir del interior de la Mezquita-Catedral por un lugar distinto al que usan para entrar, con lo que podrán seguirse unos a otros sin esperas.
Fuentes próximas a este trabajo aseguraron que el proyecto responde a las indicaciones realizadas en los últimos meses por los técnicos de la Delegación de Cultura. Se trata de un trabajo muy minucioso, ya que los responsables de la Administración, que tienen que velar por la conservación del monumento, han insistido en conocer todos los componentes, incluyendo los goznes y fijaciones. Los arquitectos conservadores del templo han sido los encargados de redactar este proyecto, que les ha ocupado en los últimos meses, siempre en diálogo con los técnicos, según ha insistido varias veces la delegada de Cultura de la Junta, Manuela Gómez.
El proyecto que ahora tendrá que aprobar la Comisión Provincial de Patrimonio supone que una de las celosías, que son fijas y no se pueden mover, pasa a ser una puerta. Tendrá dos jambas, que se abrirán hacia el interior y permitirán pasar a los cortejos. Cuando no haya cofradías —durante prácticamente todo el año— se cerrará y el trabajo no se percibirá desde el exterior.
La Comisión Provincial de Patrimonio, integrada por personal de la Delegación de Cultura y por un grupo de personas con experiencia en este ámbito, determinará entonces si este proyecto es apropiado o no.
A partir de entonces, comenzará una segunda fase del trabajo, que consistirá en decidir cómo se lleva a cabo. El Cabildo tendrá a partir de entonces dos opciones. Una de ellas sería «partir» en dos la celosía actual para realizar las dos jambas. Si no fuera técnicamente posible, tampoco se descarta la realización de una nueva, que en lo externo sea exactamente igual que la que ahora existe, y por lo tanto también idéntica a las otras tres. Todo ello siempre se realizaría de acuerdo con las indicaciones de la Delegación de Cultura. El aspecto exterior de esta zona occidental de la fachada norte seguirá entonces siendo el mismo que en las últimas décadas.
Que se opte por una solución o por otra dependerá del trabajo con la celosía una vez que se cuente con la autorización de la Junta de Andalucía. De hecho, está descartado poder contar con ella para la Semana Santa de 2015, puesto que las celosías que dibujó De La-Hoz son estructuras de gran altura y varias toneladas de peso. Desde su instalación en el año 1971 nunca se han desmontado y no se espera que sea un trabajo sencillo.
De hecho, los técnicos ya visitaron la Mezquita-Catedral el pasado Martes Santo, un día en el que pasaron por allí seis cofradías, y conocieron, guiados por el Cabildo Catedral y los arquitectos, las líneas generales del proyecto que ahora se ha plasmado en el documento presentado ante la Administración autonómica.
Se trata de la segunda propuesta de intervención en la fachada norte, y ambas guardan relación con la pretensión de las hermandades de llevar la carrera oficial al primer templo de la diócesis. La primera comprendía un proyecto muy ambicioso que abarcaba todo el muro, tanto las celosías de Rafael de La-Hoz, que se querían retirar, como los vanos ahora cegados de la zona que está al este de la Puerta de las Palmas. Todas tendrían el mismo aspecto, con piedra de ágata.
La tercera celosía
El proyecto se presentó en el año 2011 y al siguiente la Comisión Provincial de Patrimonio lo rechazó, con lo que hubo que empezar de nuevo. La Delegación de Cultura y el Cabildo acordaron entonces centrarse en la segunda puerta y en no variar el aspecto de las celosías, que en el proyecto anterior se iban a reubicar.
En un principio se pensaba que las cofradías pasarían por la cuarta celosía, la más próxima al acceso de los turistas. Durante varios siglos allí, según está documentado, había existido una puerta llamada de Nuestra Señora del Pilar, que se utilizaba precisamente para las procesiones. Sin embargo, los últimos trabajos han aconsejado que sea la tercera celosía la que pase a ser la ansiada segunda puerta para que las hermandades puedan llevar hasta la Catedral la carrera oficial.
De aprobarse este proyecto, cuando se lleve a cabo supondrá un paso de gigante hacia la aspiración de que todas las hermandades hagan estación de penitencia al primer templo. Las corporaciones penitenciales se mostraron rotundamente a favor (30 votos afirmativos, cuatro en contra y dos en blanco) de estudiar una carrera oficial que pase por la Mezquita-Catedral en una asamblea celebrada hace un año. Así, las hermandades entrarían a la Catedral por la Puerta de las Palmas y saldrían por la nueva, y no tendrían que esperar para acceder a que abandonara el templo la anterior, como ahora.
