TRIBUNA GONDOMAR
EL PODER DE LA MENTE
El Córdoba necesita un triunfo que le aporte puntos y otro estado anímico
«YA puede venir el mejor psicólogo del mundo que si ellos no se creen que somos tan buenos como los demás, nadie los va a convencer», sentenció Miroslav Djukic en su comparecencia semanal. Una frase lapidaria para definir el estado anímico de un vestuario que lleva 12 jornadas sin ganar en Primera. Discrepa con esa opinión la prestigiosa psicóloga deportiva Patricia Ramírez, que esta semana confirmaba en declaraciones a este diario que «el Córdoba necesita intervención psicológica», especialmente por su situación.
Particularmente, me parece buena la colaboración de un profesional que trabaje en la mente de los jugadores para ganar confianza y seguridad. También en cómo afrontar situaciones adversas o incluso beneficiosas (gestionar un 0-2, por ejemplo). En un mundo muy profesionalizado, no entiendo la reticencia a esta figura. En las canteras de todos los clubes grandes ya la tienen. No comprendo por qué la élite se resiste.
Con ayuda psicológica profesional o sin ella, lo cierto es que el Córdoba necesita un triunfo para sumar puntos en la clasificación y para cambiar su bajo estado anímico. Soy de los que piensa que en el deporte de alto nivel toda ayuda es poca. Si se mima la táctica, la técnica, la estrategia, lo físico, los horarios, el descanso, el peso y hasta a alimentación, ¿por qué no se cuida o se trabaja un aspecto tan decisivo en cualquier profesión como la cabeza?
En lo que coincido con Djukic es que una victoria puede cambiar lo que es una realidad, que ni ellos se creen aún donde están.