Cameron desbarraLos riesgos del populismo de salón
El primer ministro británico, David Cameron, desgranó ayer un paquete de medidas orientadas a poner coto a la inmigración, algunas rayanas en la pura demagogia. En tiempo electoral, Cameron se ve arrastrado por el auge del populismo xenófobo, una espiral que no se combate intentando ocupar su espacio, sino con sentido de la responsabilidad. Su amenaza de salirse de la UE es el reflejo de su propia debilidad. Sobreactuando y con brindis al sol no es como se coge al toro por los cuernos. Cameron se confunde gravemente. En realidad, lleva haciéndolo desde hace meses.