El Lucena expone el 100% para frenar al Villanovense

Cuando afloran las turbulencias, los vestuarios responden frecuentemente con un paroxismo de la fusión. La derrota en el Nuevo Arcángel precedió a un ineludible aplazamiento de un porcentaje de los salarios mensuales. Las estrecheces que están padeciendo los futbolistas del Lucena se soportan en silencio y procuran ignorarlas en el césped. «Aquí vivimos todos de nuestro trabajo, es una situación difícil para todos, pero intento ser lo más profesional posible y exigirles a mis hombres lo máximo», afirma Juan Arsenal antes de medirse con el Villanovense más fecundo en sus seis temporadas en Segunda División B (Ciudad de Lucena, 17.00).

Pese a los inconvenientes, el técnico castellano-manchego asevera que hay «buena relación» con la directiva. «En todo momento sabemos lo que pasa en el club y estamos encantados de que nos comuniquen cómo es la realidad», precisa.

El central Santacruz y el extremo Chirri siguen lesionados. Además, el zaguero Rafa Villanueva, con molestias en el abductor, y el pivote Antonio Sarmiento, a causa de una contractura en los isquiotibiales, están «entre algodones», en palabras del entrenador. Por el contrario, el ariete Pedro Beda y el mediapunta Maxi Sepúlveda regresan con la encomienda de elevar los números en la portería contraria.

El cuadro extremo, noveno con 18 puntos, afronta el partido con el ilusionante objetivo de encadenar, por primera vez en su historia, dos victorias consecutivas en la categoría de bronce. El extremo derecho Diego Pantoja abandonó la disciplina del club y Francisco Bordallo, segundo entrenador que suplirá a Julio Cobos en el banquillo, tampoco dispondrá de Salvi por sanción. El delantero Carlos Fernández ya está recuperado de su lesión.