A juicio por una decena de hurtos y robos en diez supermercados

El Ministerio Público solicita penas que suman ocho años y medio de prisión para un acusado de cometer una veintena de hurtos y robos en hasta diez supermercados de la capital cordobesa. Según la calificación, el encausado no dudaba en utilizar la fuerza si era pillado «in fraganti» con los productos escondidos.

De este modo, los días 4 de agosto, y 27, 10, 23 y 29 de septiembre de 2010 hizo suyos, sin pasar por caja, productos valorados en 422 euros de un establecimiento comercial del pasaje Manuel Sandoval. Asimismo, el 14 y el 22 de septiembre de ese mismo año hurtó en un supermercado del Realejo artulos por importe de 92,70 euros.

El procesado repitió la operación en autoservicios de la avenida de Hornachuelos, la calle San Pablo, avenida Menéndez Pidal, Rodríguez Martón, Jesús Rescatado, la Viñuela, Juan de Cervantes y la avenida de la Fuensanta. El total de lo apropiado en estos supermercados asciende a 695,42 euros.

Por otro lado, el 21 de enero de 2011 entró en un establecimiento de la avenida Jesús Rescatado y «cogió con ánimo de hacerlas suyas diversas latas de conservas por importe de 9,98 euros», apunta el fiscal. Uno de los responsables del local se percató del hurto e instó al procesado para que devolviera dichos efectos, a lo que el inculpado respondió sacando una navaja y amenazando de muerte al trabajador.

Además, el 22 de febrero de 2011, el presunto ladrón cruzó la puerta de un supermercado de la calle Rodríguez Marín y, como en la ocasión anterior, fue sorprendido por uno de los cajeros mientras trataba de llevarse varios productos bajo el chaquetón. El acusado actuó, una vez más, de forma amenazante y logró llevarse 18 botes de champú y diez platos de loncheado ibérico, todo ello valorado en 110 euros.