El Tribunal de Cuentas alerta de la falta de control en la Agencia Antidopaje hasta 2013
Pese a la ausencia de objetivos, los directivos cobraron siempre el plus de productividad
Entre 2009 y 2013 el personal directivo de la antigua Agencia Antidopaje percibió «en su totalidad» y «en su nivel máximo» el complemento variable de productividad. Es una de las principales conclusiones de un informe del Tribunal de Cuentas que, sin embargo, pone la atención en la ausencia de criterios para fijar la cuantía de esos complementos ligados a la productividad. Según el órgano fiscalizador del Estado, aunque esas retribuciones están ligadas «legal y contractualmente» al cumplimiento de unos «objetivos evaluables», éstos ni siquiera existen.
«El Tribunal de Cuentas no ha tenido conocimiento, ni por parte de los Ministerios de tutela ni por parte de la Agencia, de iniciativa alguna para paliar esta situación, sostenida desde su creación en 2008», añade el resumen del «informe de fiscalización de la AEPSAD, anteriormente denominada Agencia Estatal Antidopaje. Este estudio fue aprobado por el Pleno del tribunal el 30 de octubre.
Medidas de control
Otras de las conclusiones a las que llega el Tribunal de Cuentas revela que entre 2009 y 2013 la Agencia Española Antidopaje no implantó ninguno de los mecanismos de control de eficacia previstos en la legislación vigente, salvo en el área correspondiente al Laboratorio de Control de Dopaje (están determinados por la Agencia Mundial). Es más, no existe ningún informe a este respecto –salvo los impuestos por la Agencia Mundial– y la Comisión de Control del Consejo Rector de la entidad «no se ha reunido nunca durante el periodo fiscalizado». Esta circunstancia contrasta –como se encarga de resaltar el informe–con el hecho de que los directivos siempre cobraran el complemento máximo vinculado a la productividad.
El tribunal concluye que «no se han cumplido» las disposiciones legales relativas a su «diseño estructural y de funcionamiento», ya que «carece de contrato de gestión a pesar de ser el elemento estructural clave del desarrollo de su actividad como Agencia Estatal, incumpliendo las disposiciones legales y reglamentarias sobre la materia». En relación con el análisis del grado de cumplimiento de sus metas, señala que «ha carecido» de objetivos mensurables y de indicadores para su evaluación. El Tribunal de Cuentas establece otra excepción de nuevo vinculada a las normas y el control de la Agencia Mundial: el área específica al laboratorio de Control de Dopaje.
La buena noticia se encuentra en relación con el área de contratación, convenios de colaboración y encomiendas de gestión. «La muestra analizada revela una buena gestión administrativa», dice el informe, que no obstante también denuncia que no se han cumplido las previsiones en materia de igualdad efectiva de mujeres y hombres en el Consejo rector de la entidad». Por todo ello, el Tribunal insta a los ministros de Educación, Cultura y Deporte y de Hacienda a aprobar un plan de gestión que incluya «unos objetivos claros, unos indicadores adecuados para su medición y unos métodos de valoración de resultados».