Los músicos piden que la Junta suba su aportación a la Orquesta

El ejemplo son el Ayuntamiento de Córdoba y la Diputación Provincial. El comité de empresa de la Orquesta de Córdoba pidió ayer a la Junta de Andalucía que iguale su aportación al Consorcio a la que hace el Consistorio, que para el próximo año 2015 será de 1.116.000 euros. Que la Administación autonómica aumente la cantidad que figura en sus cuentas, y que es la misma que la del año pasado, es crucial para salvar el Consorcio y frenar su mala situación económica.

Los trabajadores ensalzaron la respuesta del Ayuntamiento al concierto que se celebró el pasado 5 de octubre en la plaza de Las Tendillas, lo que se plasmó en 80.000 euros más para 2015 en los presupuestos que ha presentado el Gobierno local para el próximo año. También están contentos con la actitud de la Diputación Provincial, que aumenta su aportación y espera poder entrar en el Consorcio el próximo año, además de haber gestionado, junto con el Consistorio, la grabación de la banda sonora de la película norteamericana «Wellcome to harmony», que se ha realizado esta semana en el Teatro Góngora.

Eso sí, recuerda a la Junta de Andalucía su propuesta de «gestionar la implicación de la Diputación de Jaén» en el sostenimiento de la formación sinfónica mediante los conciertos en esta provincia vecina. Las negociaciones, hasta el momento, no se han plasmado en ningún acuerdo conocido.

La presidenta del comité de empresa, Laura Llorca, recordó que la situación es «muy crítica», puesto que «a pesar de los esfuerzos realizados por los trabajadores, muchos de ellos voluntariamente, el problema no se soluciona». Así, ven «imposible» reducir gastos y se sigue generado déficit. «Por si fuera poco, la Junta reclama 110.000 euros de 2011», sostuvo. Es la paradoja que se dio después de que la formación hubiera ahorrado en aquel año por el recorte de las nóminas: que la Administración autonómica reclamaba una parte de la subvención que entendía como no subvencionada.

La única solución es que las Administraciones sostengan a la formación, «mientras no haya condiciones para recaudar fondos privados, como la ley de mecenazgo». Así, para el comité de empresa, «la cultura debe ser un derecho, y no algo al alcance únicamente de una élite que pueda pagarla».

Por ese motivo, ha insistido en «no valorar su continuidad en función de la rentabilidad que genere», en una alusión a las palabras del consejero de Cultura, Luciano Alonso, que reprochaba la baja respuesta del público y hasta esgrimió que en los conciertos de abono apenas asistía un 70% del aforo de los recitales y menos de la mitad en los demás, lo que a su modo de ver insistía en que era un problema de la propia formación y de su capacidad de convocatoria entre los ciudadanos.

Laura Llorca pidió que, si no hay suficiente para frenar el déficit, «se hagan las aportaciones necesarias» desde las Administraciones para poner freno a la situación de peligro de la Orquesta.