Las esperanzas durante un naufragio
Lo que no falta ningún día son cartas sobre a la situación en Cataluña. Muchas, motivadas por la sucesión de los acontecimientos; pero también llegan otras que toman como pie reflexiones publicadas en estas páginas. Tal es el caso de JOSÉ FUENTES MIRANDA, que se refiere a una Tercera: «En un magistral artículo de ABC, habla Juan Eslava Galán de las chapuzas españolas a lo largo de la historia. Termina su artículo aludiendo al gran naufragio que puede sobrevenir con las pretensiones suicidas y chapuceras del separatismo catalán, pero salvando la esperanza: “Es difícil predecir el resultado de esa chapuza, porque mientras hacemos surfing sobre el lomo de esta ola de insensatez autonómica y nacionalista no se columbra más futuro que el naufragio en los bajíos de la realidad. Quizá entonces los náufragos que sobrevivan al desastre decidan juntar las diecisiete tablas autonómicas para construir una balsa que nos restituya el nombre de España”. Efectivamente, la esperanza es lo último que se pierde. No hay marcha atrás por parte de los políticos separatistas y la gran ola del 9-N crece y crece, amenazando llevarse por delante la unión y convivencia en paz de los pueblos que integran ese sueño de siglos llamado España. Todavía confiamos en que, a partir de ese día, ese sueño no se convierta en pesadilla», termina el lector.