La lluvia dificulta la búsqueda de la mujer desaparecida desde el domingo

La búsqueda de Araceli Cobo, de 76 años, en el cerro de La Salina de Baena cumplió ayer su sexto día y, como en las anteriores batidas, resultó infructuosa. La lluvia dificultó las labores del dispositivo desplegado en la zona. Con el barro llegando casi hasta las rodillas, los agentes de la Guardia Civil, de la Policía Local, Protección Civil, de voluntarios y familiares se batían durante más de dos horas unos tres kilómetros, a ambos márgenes, del río Guadajoz, donde se centró la búsqueda, desde Ízcar. En este punto se detenía el dispositivo a mediodía. El de ayer fue un rastreo lento y delicado debido a la lluvia y al espesor de la maleza.

Por la mañana, la Guardia Civil informó de que han solicitado la incorporación a la búsqueda de un perro de rastreo de restos cadavéricos. El Instituto Armado no descarta ninguna posibilidad en la resolución de este suceso. En cuanto a la búsqueda, además de inspeccionar los márgenes del río unos kilómetros antes de Ízcar, se batía nuevamente el camino de Miraverde, donde tres bomberos del parque de Baena inspeccionaron tres pozos, situados en esta zona, muy próximos a la casa familiar de la infancia de la mujer desaparecida sin hallar nada.

Además varios familiares lo revisaron a pie. Otro grupo de familiares buscaba algún rastro por la zona conocida como camino de Juan Cobo. También se batía los márgenes de la carretera que lleva a Cañete de las Torres desde el cerro de La Salina. La búsqueda se retoma hoy a las ocho y media de la mañana. Durante todo el fin de semana se mantendrá el mismo dispositivo, en el caso de que no haya ningún resultado este se reducirá.