Reacción tardía de la Junta y más riesgo
El colectivo de veterinarios de Andalucía, que celebrará este fin de semana en Córdoba su congreso, puso ayer de manifiesto la mala actuación de la Junta de Andalucía en el caso de la propagación de la lengua azul sobre la cabaña ovina de varias provincias andaluzas, especialmente Córdoba. La virulencia de los casos detectados ahora en Tarifa (con el serotipo de máximo riesgo) amenaza de nuevo a Córdoba, tras la alerta inicial que obligó a los ganaderos a vacunar por su cuenta sus rebaños ante la inoperancia de la Junta, que ayer sí anunció millones de vacunas.