Blindado por sus concejalesMartínez, preso y alcalde a distancia

Presidente de la Diputación de León y alcalde de la localidad de Cuadros, en la que hace y desahace desde hace veintitrés años, Marcos Martínez se encuentra en prisión, pero son los concejales que aún lo apoyan quienes se encargan de multiplicar y airear la sensación de bochorno. Rebelados contra la dirección del PP, los ediles se niegan a expulsar a Martínez, que seguirá ejerciendo como regidor de Cuadros desde la cárcel. Como sucedió en el caso de Marbella tras su expolio, la disolución del Ayuntamiento de Cuadros es una exigencia ética. Una democracia madura debe respetar la presunción de inocencia, pero no tolerar la complicidad de toda una corporación con su capo.