ENCINAS REALES
El alcalde tilda de «venganza» el caso de la Casa de la Cultura
Prieto afirma que ha entregado al juez pruebas «de que todo es una falacia»
Juan Víctor Prieto Sánchez, alcalde popular de Encinas Reales, compareció ayer para hablar sobre el presunto delito de malversación que le imputa el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Lucena. Los sucesos ocurrieron en 2011 por la ejecución de unas obras en la Casa de la Cultura con cargo al Plan de Fomento del Empleo Agrario (PFEA). Prieto, que, según sus palabras, le entregó el pasado viernes al juez «documentación y pruebas de que todo es una falacia», expuso que la raíz del problema es «un grave error» en la solicitud formulada por su antecesor, el socialista Gabriel González Barco. El PSOE interpuso la denuncia que abrió este caso.
El regidor, que enviará a todos los habitantes del municipio una carta explicando su versión de lo acontecido, mostró una serie de documentos para «demostrar la falsedad de las acusaciones». «No se pueden consentir insinuaciones del tipo ‘¿dónde está el dinero?’; porque con ello lo único que pretende González es hacer dudar y alimentar las más ruines y rastreras sospechas».
Así, Juan Víctor Prieto Sánchez aseveró —y adjuntó a sus afirmaciones copia de los ingresos firmados por el interventor de la Administración Local— que el dinero fue depositado íntegramente en las cuentas del Ayuntamiento en dos entregas de 76.473 euros cada una, destinadas a mano de obra, y después, con sendos pagos de 35.946 y 46.216 euros, cuya finalidad era la adquisición de materiales.
Respecto al total de la subvención, el regidor señaló que «no es como afirma González Barco, de 291.000 euros, ya que la Junta y la Diputación sufragan solo el 40 por ciento del importe de los materiales, por lo que el resto ha de asumirlo el Ayuntamiento». De esta forma, la cantidad total se reduciría a 214.126 euros. El regidor señaló que «el dinero se gastó para la finalidad de la ayuda concedida».
Finalmente habló sobre «el problema de la subvención» y de éste culpó «a la anterior Corporación». Aunque el proyecto redactado decía que la obra se desarrollaría en la primera y segunda planta, las partidas de la memoria técnica presentada afectaban a la planta baja, donde trabajaba otra empresa, según explicó ayer Prieto apoyado en un documento que enseñó durante su intervención y en el que «queda constancia de la coincidencia de trabajadores de esta sociedad y del PFEA en el mismo edificio y en el que se afirma que el personal del PFEA ejecutará trabajos de albañilería en la segunda planta», aseveró.
Para el edil del PP, la denuncia responde a la venganza por la reclamación de dietas del socialista promovida por los populares y que concluyó con una resolución favorable al exalcalde y su equipo.