¡Hay cosas que solo pasan en España!

CARLOS LUIS RUIZ ALCAIDE

Las actuaciones protagonizadas por el personaje ya conocido como el «pequeño Nicolás» solo se pueden dar en España. Ha habido casos en otros países, pero nunca con un protagonista tan joven. A Isabel II de Inglaterra se le coló un individuo hasta el mismísimo dormitorio, aunque la reina, con esa maravillosa flema británica, lo invitó a te mientras esperaba al servicio de seguridad. A Obama, y antes a Bush, se le colaron en varias recepciones como invitados un matrimonio —el mismo matrimonio, ¡que ya tiene guasa!—, a quien no conocía absolutamente nadie. Pero que un niño de 20 años —con tanta cara de niño que aparenta 17 o menos— se codee con políticos bragados, embauque a un empresario para que le ceda gratis una lujosa casa, le saque pasta a otro a cambio de conseguir favores y esté como invitado en la proclamación del rey, eso solo puede pasar aquí. Y solo pasa aquí, por el papanatismo, mezclado con cierto complejo de inferioridad, que tiene buena parte de la sociedad española. Ese papanatismo que propició los dudosos negocios de Urdangarín y su enriquecimiento ilícito.

En España basta que cualquiera aparezca fotografiado varias veces con un poderoso, político o empresario relevante para que el personal de a pie dé por hecho las «agarraderas» e importancia del fulano. Y al personal de seguridad, ante el temor a meter la pata si pregunta, en ocasiones ni se le pase por la imaginación comprobar la representación que el listo de turno dice tener.

El «pequeño Nicolás» es ya un héroe para otros que esperan su turno ¡Saben de sobra que en España tienen carrera!

¡Hay cosas que solo pasan en España!

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación